Investigadores del Instituto de Biomedicina y Salud de Guangzhou, en China, lograron un avance revolucionario al crear embriones quiméricos que contienen una combinación de células humanas y porcinas. Este logro marca la primera vez en la historia que se consigue cultivar un órgano sólido humanizado dentro de otra especie.
Los científicos se centraron en desarrollar riñones humanos dentro de cerdos, un hito que podría tener importantes implicaciones en la medicina de trasplantes. Los riñones humanizados presentaban una estructura y formación de túbulos normales después de 28 días de desarrollo en las madres sustitutas porcinas.
Hasta ahora, los intentos anteriores de cultivar órganos humanos en cerdos no habían tenido éxito debido a las diferencias fisiológicas entre las células humanas y porcinas. Sin embargo, este nuevo enfoque utiliza técnicas de manipulación genética y cultivo celular para mejorar la integración de células humanas en tejidos receptores.
El proceso implica la creación de un nicho dentro del embrión porcino para que las células humanas no compitan con las porcinas. Además, las células madre pluripotentes humanas se modifican para hacerlas más susceptibles a la integración en el tejido porcino. Finalmente, los embriones quiméricos se cultivan en condiciones optimizadas que proporcionan nutrientes y señales específicas a las células humanas y porcinas.
Los resultados del estudio revelaron que los riñones desarrollados en los embriones quiméricos estaban compuestos por un 50-60 % de células humanas y mostraban una estructura normal para su fase de desarrollo. Las células humanas se localizaban principalmente en los riñones, mientras que el resto del embrión estaba compuesto por células porcinas.
Aunque este avance es prometedor, los investigadores reconocen que aún hay desafíos por superar para que esta tecnología sea aplicable en trasplantes de órganos humanos. Sin embargo, esta investigación abre nuevas oportunidades para estudiar el desarrollo de órganos humanos y enfermedades relacionadas con el desarrollo, lo que tendría un enorme impacto en la medicina y la investigación biomédica en el futuro.