Dos pescadores identificados como Eugenio Aros e Ismael Lemus, compartieron su historia de resistencia y rescate al ser rescatados de un naufragio en el Estrecho de Magallanes. Su embarcación, el Cóndor II, se hundió en aguas cercanas a la Isla Dawson, dejándolos a la deriva en las gélidas aguas mientras luchaban por sus vidas.
"Gracias a Dios estamos con vida. Es una segunda oportunidad y hay que aprovecharla", expresó Eugenio Aros. Ismael Lemus, su compañero y amigo, agregó: "hicimos un pacto de por vida, porque los dos nos salvamos. Estuvimos a punto. Yo perdí el conocimiento… me revivieron en Puerto Harris."
El viaje de estos hombres comenzó mientras llevaban a cabo su labor de extracción de centolla a bordo de la embarcación Cóndor II, que había estado en el mar durante casi dos meses. Según relató Lemus al diario Las Últimas Noticias, el accidente ocurrió cuando se dirigían hacia Punta Arenas para recoger a un tripulante. La cañería que enfriaba el motor se rompió y provocó que la embarcación comenzara a hundirse rápidamente.
Aros y Lemus tuvieron que aferrarse a bidones de petróleo que llevaban como reserva, esperando ser rescatados en medio de las gélidas aguas. Su esperanza radicaba en que otras embarcaciones que buscaban centolla pudieran avistarlos. Finalmente, Sandro Cárdenas, conocido pescador de la zona, escuchó su llamado de emergencia y coordinó el rescate.
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Sebastián Gonzáles, primo de Cárdenas y dueño de la embarcación Macarena II, fue quien finalmente los localizó. A pesar de las difíciles condiciones, pudieron rescatarlos, aunque ambos presentaban signos de hipotermia. Después de varias horas expuestos al frío extremo, los pescadores fueron abrigados y atendidos a bordo del Macarena II.
Al mismo tiempo, la armada de Chile activó un operativo de emergencia que incluyó el zarpe de lanchas de policía marítima y el despliegue de un avión de exploración. Los pescadores fueron trasladados hacia Puerto Harris, allí recibieron atención médica. "Entre nosotros nos apoyamos. En Puerto Harris me pusieron bolsas para hipotermia y me revivieron", compartió Lemus, agradeciendo a todos los involucrados en el rescate.
