Visión y resolución de necesidades: las carreras del futuro

El avance de las tecnologías y las nuevas necesidades que surgen en la sociedad son detonantes de cambio social, lo que a su vez transforma el modo en que convivimos, y actualmente lo que se estudia. Las variaciones en el mundo han cambiado las profesiones y, por consiguiente, las oportunidades laborales.

En México y en muchos otros países, se está terminando un año escolar más y ello significa que miles de estudiantes de preparatoria darán el salto a la universidad. Si bien hay muchas carreras que siguen siendo las más comunes como medicina, contaduría o ingenierías, hay muchas que están siendo desplazadas por las carreras del futuro.

Hablar de las carreras universitarias del futuro es abordar las que se adaptan mejor a las necesidades emergentes, que tienen visión para resolver los problemas que más aquejan a la gente como el cambio climático o fuentes energéticas alternativas y, en lo más nuevo, la innovación tecnológica, todo desde un enfoque multidisciplinario. La mayoría de estas áreas de estudio han surgido en años recientes y han cambiado la forma en que se desarrollan las más tradicionales.

Ford Australia y las universidades Deakin y Griffith del mismo país elaboraron un informe titulado “100 Trabajos del Futuro”, en el que detallan cuáles son las áreas de estudio con más proyección y que serán las predilectas en poco tiempo.

Entre las destacadas está la Ingeniería en Energía, pues hoy en día la búsqueda de alternativas a los combustibles fósiles es una prioridad del sector energético, por lo que se ha vuelto imprescindible la formación de profesionistas en esta rama. En esencia, lo que esta especialidad busca es nuevas formas de generar energía que disminuyan las emisiones de contaminantes a la atmósfera, dejando atrás la dependencia de gas o petróleo.

Una de las carreras más llamativas en este informe es la de Diseñador de Implantes Digitales. Como el nombre lo dice, se centra en crear partes que se implantarán en el cuerpo humano cuando sea necesario, ya sea por la pérdida de un miembro o para mejorar la calidad de vida y salud por padecimientos, como enfermedades neurodegenerativas. Aquí se conjugan diferentes especialidades como la biología, anatomía, diseño de implantes, ingeniería en sistemas y desarrollo tecnológico.

Aunado a la creación de inteligencias artificiales cada vez más avanzadas, ha surgido la necesidad de formar especialistas en Ética de Robots. No solo está orientado al área que menciona, sino que también es para abordar los dilemas éticos y morales que surgen con la creación de cyborgs, robots, plataformas de realidad aumentada, entre otras. Un especialista en ética debe comprender la lógica que se da en los robots, su interacción con los humanos y las emociones que puedan desplegar, todo con un enfoque filosófico.

Siguiendo la línea del desarrollo tecnológico, es inminente que las IA se convertirán en parte cotidiana de la vida humana, por lo que también hay formación profesional para Educadores de Inteligencia Artificial. El objetivo de esta nueva carrera es que haya alguien que pueda instruir a la gente para sacar el máximo provecho de las IA. Para esto se requiere conocimientos en estrategias pedagógicas, habilidades interpersonales y, lo más importante, dominio completo de robots o asistentes digitales que se enseñará a usar.

Fuera de lo tecnológico, una vertiente que está tomando más fuerza en el mundo son los estudios en Reintegración de Personas Desplazadas. Debido a conflictos bélicos, condiciones de vida o por efectos del cambio climático, cada vez hay personas que necesitan adentrarse a nuevas culturas, sociedades y comunidades totalmente diferentes a las que pertenecen. La formación incluye saber sobre desarrollo comunitario e internacional, así como trabajo social. Lo más común es que se requiera a un reintegrador en fundaciones o dependencias de gobierno.

Un común denominador es que son ramas en las que se utiliza tecnología y se solucionan lo más inmediato, pero hay otros estudios que son amenazados por el auge de la inteligencia artificial, ya sea porque se verán desplazadas o por que serán modificadas.

Las carreras que podrían desaparecer en un mediano lapso afectarían industrias como la automotriz, ya que con las nuevas tecnologías muchos de sus procesos se harán de manera autónoma sin la necesidad de intervención humana. Los robots en poco tiempo empezarán a desplazar a los trabajos en armado o en supervisión de procesos.

La contaduría también es una de las más amenazadas, ya que con la IA ahora es viable dejar obsoleta la presencia de humanos en ciertas tareas rutinarias de cálculo de impuestos y se pueden reducir la cantidad de errores y el análisis de datos. Algo similar se avecina con los sistemas que crean imágenes a partir de texto, que podrían dejar a un lado a varios sectores en publicidad, fotógrafos, diseñadores y hasta modelos de producto.

Hay otras que solamente mutarán debido a que la presencia de humanos seguirá siendo necesaria, como es el caso de los redactores o escritores. Desde que inició el 2023, uno de los avances tecnológicos más llamativos fue el Chat-GPT, que sirve como un sistema de lenguaje autónomo capaz de crear textos en cuestión de segundos. No todos serán erradicados, pero el ámbito también será modificado tal y como se conoce hoy en día.