El mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, dijo que los aspirantes del partido gobernante Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) a la candidatura presidencial de 2024 que pertenecían a su gabinete pueden volver a su puesto en caso de no ser elegidos como abanderados.
De los contendientes, Adán Augusto López y Marcelo Ebrard eran parte de su equipo; fungían hasta este junio, respectivamente, como titulares de las secretarías de Gobernación (Segob) y Relaciones Exteriores (SRE).
"Va a depender de los resultados [del proceso interno del partido]. Hay que esperarlos y, la verdad, todos los que están participando son gentes con mucha experiencia en la administración pública, en la política, en la buena política. Son honestos y tienen las puertas abiertas, nunca se les han cerrado", afirmó el presidente de México en su conferencia de prensa matutina.
López Obrador hizo hincapié en que los cambios se reflejarían después de que se nombre a la persona que representará a Morena para los comicios del próximo año, cuando el país latinoamericano renueve en las urnas su poder ejecutivo federal.
"La gente es la que va a resolver a quién quiere que yo le entregue la estafeta, el bastón de mando, para conducir el movimiento de transformación. No es como en el flanco derecho, que ahí ya eligieron los de arriba", sostuvo en referencia a la coalición opositora, que califica de derechista.
Los aspirantes de Morena —Marcelo Ebrard, Adán Augusto López, Ricardo Monreal, Manuel Velasco (del Partido Verde Ecologista de México, aliado de Morena), Gerardo Fernández Noroña (del Partido del Trabajo) y Claudia Sheinbaum, la única mujer en la contienda interna—, iniciaron desde el 19 junio y finalizarán el 27 de agosto sus tareas de proselitismo al interior de la organización política.
Posteriormente, entre el 28 de agosto y el 3 de septiembre se realizará una encuesta interna, misma que definirá al candidato o candidata del partido fundado por López Obrador. Será el 6 de septiembre cuando se dé a conocer al candidato o candidata de la fuerza política.
En repetidas ocasiones, López Obrador ha descartado tener preferencia por alguna de las personas que participarán en la encuesta interna del partido oficialista y señaló que el método ha sido aplicado por el grupo político para elegir a sus abanderados en las elecciones estatales, lo que ha evitado rupturas entre sus integrantes.
El mandatario ha insistido en que no tendrá injerencia en la designación de la persona que, de ganar en las elecciones del verano de 2024, lo sustituirá en el cargo. La organización del proceso electoral estará a cargo del Instituto Nacional Electoral (INE).
