Accidentes en piscinas: ¿cómo proteger a los niños durante el verano?

Accidentes en piscinas: ¿cómo proteger a los niños durante el verano?

Foto: Enfoque

En el periodo vacacional, los accidentes de niños aumentan de forma considerable, sobre todo en las áreas con piscinas, pues son uno de los lugares predilectos para pasar el verano. Ante este escenario, es importante tomar precauciones adicionales que puedan garantizar la seguridad de los pequeños y evitar que se ahoguen. 


Los accidentes en albercas suelen ser accidentes rápidos, pero de graves consecuencias, por ello es fundamental estar preparado y tomar medidas preventivas. Para nuestro beneficio, existen una serie de accidentes comunes a los que podemos hacer frente con diversas recomendaciones


El ahogamiento es el riesgo más grande y común, asociado con las piscinas. Los niños pueden perderse en el fondo del agua en cuestión de segundos y sin hacer ruido, por lo que la supervisión constante es esencial. De esta forma, podemos entender que nunca se debe dejar a un niño solo en el agua, incluso si hay un salvavidas presente. 


Algunas recomendaciones para evitar este escenario, es mantenerse sin distracciones mientras se supervisa a los menores, evitando el uso de dispositivos electrónicos o el consumo de alcohol. Además, es esencial que los niños pequeños utilicen chalecos salvavidas certificados y de alta calidad. 

 

 

Enseñar a los niños a nadar desde una edad temprana mediante clases de natación, también es una buena forma de brindar herramientas que ayuden a los niños a tomar decisiones en situaciones de peligro. 


Las caídas y resbalones alrededor de la piscina son otros de los accidentes más comunes, debido a que son áreas que suelen estar mojadas, por tanto, ofrecen poco agarre especialmente para los niños que corren y juegan cerca del agua. 


Expertos en seguridad indican que es necesario colocar alfombras o superficies antideslizantes en las áreas cercanas a la piscina. Así como es necesario asegurar que el área alrededor de la piscina esté bien iluminada y libre de obstáculos. 


En términos generales, también es importante establecer reglas claras sobre el uso de la piscina y el comportamiento adecuado alrededor de ella. Una regla básica es prohibir correr o hacer carreras cerca de la alberca. 


De esta forma nos aseguramos de que los niños sean conscientes de los límites y la profundidad del agua, evitando golpes y lesiones. 

 

 

La intoxicación por productos químicos, aunque en menor medida, también es un escenario que se puede experimentar, debido a los productos usados para el mantenimiento de alguna piscina y que en caso de ingerirse o ser inhalados pueden representar un riesgo a la salud. 


Para evitar llegar a estos extremos, debemos cuidar que el almacenamiento de los productos químicos sea seguro y esté fuera del alcance de los más pequeños. Mantener todos los productos químicos etiquetados y enseñar a los niños a no beber agua de la piscina ni a tocar o manipular los productos químicos, también son buenas formas de prevenir accidentes.


Finalmente, la sobreexposición sin protección solar es un riesgo latente de sufrir un golpe de calor, sobre todo si se ha pasado un largo tiempo bajo el sol. Por ello se recomienda no solo el uso de protector solar, también de gorras o sombreros para evitar las quemaduras en la piel. 
 

Recuerda que la prevención es clave para evitar accidentes. Estas recomendaciones no sustituyen la supervisión constante de los adultos responsables, pero nos ayuda a entender lo importante que es tomar medidas adecuadas para garantizar la seguridad de los niños mientras disfrutan de las actividades acuáticas.

 

 

Notas Relacionadas