Aunque la seguridad en tu casa o negocio debería ser una responsabilidad de las autoridades, los niveles de delincuencia en el país han rebasado a las mismas por lo que miles de familias y empresarios deciden invertir en sistemas de seguridad que les permita cuidar su patrimonio.
Esto implica obviamente un gasto adicional para ellos, el cual les permite tener más tranquilidad sobre la seguridad de sus casas y negocios, aunque sin importar lo sofisticada que puedan ser, existe un margen de error que puede ser utilizado por algún delincuente astuto.
Es por ello que en Imagen Poblana te hablamos un poco sobre algunos de los sistemas de vigilancia más utilizados en la actualidad, así como los costos que pueden representar si es que decides contratar o adquirir alguno de ellos.
Videovigilancia
Las cámaras de seguridad son quizá una de las herramientas que más se asocian con la seguridad de negocios y viviendas; hay varios equipos que tienen distintas características y funciones, dependiendo del uso que pretendas darles.
Como todo, la calidad y las funcionalidades que tenga cada una de las cámaras determinará el costo que tenga; en México encontramos precios para todas las posibilidades y necesidades.
Actualmente, hay un amplio mercado de cámaras de seguridad, tanto alámbrica, inalámbricas, con conexión por cable o incluso por Wi-Fi, pero la mayoría únicamente sirve para un monitoreo del espacio.
Esto quiere decir que la cámara en sí solamente te permite monitorear tu propiedad de forma remota, por lo que si algún delincuente decide ingresar a tu domicilio o negocio, solamente serás un espectador y dependerás de la velocidad de respuesta de las autoridades dedicadas a la seguridad pública.
En redes sociales podemos ver que las cámaras de seguridad sirven principalmente para captar el rostro de la persona que perpetró algún robo o incluso documentar accidentes de tránsito, pero rara vez sirven para evitar que se concrete el delito.
Una modalidad que es más útil cuando se trata de videovigilancia hablamos, es el circuito cerrado que está conectado a una empresa de seguridad privada o incluso a los cuerpos de seguridad pública.
Hablando de números, encontramos que la simple adquisición de cámaras de seguridad va a depender del número de unidades que decidas utilizar para formar un circuito cerrado.
Los circuitos cerrados más básicos están conformados por cuatro cámaras y los precios para adquirirlos pueden ir de los 2,300 a los 6,000 pesos; los de ocho cámaras pueden ir de los 4,600 a los 12,000 pesos; mientras que los de 16 cámaras pueden ir desde 9,000 pesos a 24,000 pesos.
Una vez que ya tienes tus cámaras, deberás de instalarlas y esto dependerá del tipo de unidades que hayas comprado, pues algunas requieren de un cableado para su instalación, otras necesitan estar conectadas a una Red alámbrica de internet, y las más modernas solamente necesitan de una conexión Wi-Fi.
La mayoría de estas cámaras debe de transmitir todo lo que captan a un sistema centralizado que permitirá almacenar las grabaciones, pues de lo contrario se convertiría en un simple monitor.
Dependiendo del tipo de cámara encontrarás que la instalación por parte de un profesional puede ir desde los 2,000 hasta los 11,000 pesos por cada una de las cámaras adquiridas, es decir, si tu sistema de circuito cerrado tiene cuatro cámaras la instalación podría costarte desde 8,000 pesos.
Muchas empresas de seguridad privada cuentan con diferentes paquetes en los cuales se ofrece la instalación y renta de las cámaras de videovigilancia, así como el monitoreo de las mismas en tiempo real.
En este rubro encontramos que las empresas que se dedican a ofrecer este servicio pueden cobrar hasta 10,000 pesos al mes por la renta e instalación del equipo así como por la operación de la misma.
Sistema de alarma
Los sistemas de alarma son otra de las formas más comunes de cuidar una casa o negocio, pero al igual que las cámaras existen varias variedades y formas de operarla.
Según la consulta, comprar un sistema de alarma que requiera una instalación por cable requiere de un presupuesto que va de los 4,000 a los 12,000 pesos; las alarmas inalámbricas pueden costar desde 2,400 hasta 13,500 pesos; mientras que las alarmas de uso personal pueden costar desde 1,800 hasta 10,000 pesos.
Dicho lo anterior, encontramos que las alarmas inalámbricas son aquellas que no requieren de una instalación por cable, lo cual repercute directamente en el ahorro al momento de la instalación.
Este tipo de alarmas funcionan mediante una conexión a internet que te permite monitorear a través de esta vía los sensores o cámaras que pueda contar el servicio.
Las alarmas cableadas son aquellas que están generalmente operadas por algún equipo de seguridad, son más complejas y permiten instalarse a centros de respuesta inmediata por empresas de seguridad privada.
Los sistemas de alarmas inalámbricos comúnmente son de renta y se ofrecen por parte de las empresas de seguridad privada mediante paquetes que pueden costar de 5000 a 12,000 pesos mensuales.
Al igual que en las cámaras de videovigilancia, hay alarmas privadas que son operadas directamente por el dueño de la casa o negocio y solamente él se encarga de monitorearlas.
Hay que señalar que sin importar cuál tipo de sistema de vigilancia decidas emplear, lo más recomendable siempre es contar con asesoría por parte de algún especialista, pues este te expondrá tus necesidades reales y elegir el sistema más adecuado.
Algunos negocios requieren de una protección especializada que algunas empresas de seguridad privada no lo pueden ofrecer, situación que también debe de ser tomado en cuenta por cada uno de los clientes.
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