Un niño muerto y numerosos desaparecidos en trágico hundimiento cerca de Gran Canaria

A causa del hundimiento de una lancha neumática, un niño falleció y más de 30 personas están desaparecidas. El avistamiento de la embarcación tuvo lugar el martes por la tarde, gracias a un avión de Salvamento Marítimo español, que ubicó el lugar a aproximadamente 150 kilómetros al sur de Gran Canaria.

Según el centro de coordinación de salvamento de Rabat, la patrullera Al Mansour logró rescatar con vida a 24 pasajeros, algunos de ellos estaban en el agua. Un portavoz de la sociedad estatal española informó que el helicóptero español Helimer 201, desplegado desde Canarias, recuperó el cuerpo de un niño en la zona del naufragio y lo trasladó al aeropuerto de Gran Canaria.

El operativo de búsqueda se puso en marcha tras recibir una llamada de socorro. Según el colectivo Caminando Fronteras, la embarcación zódiac, que transportaba a aproximadamente 60 personas, incluyendo seis mujeres y un menor, había partido desde Cabo Bojador.

La lancha fue avistada por un avión de Salvamento Marítimo a las 19:53 horas del martes, después de recibir la llamada de socorro. Se solicitó asistencia a cualquier barco mercante en la zona y el Navíos Azure, un portacontenedores de Islas Marshall en ruta hacia Algeciras (Cádiz), se acercó a la lancha y permaneció junto a ella hasta que se produjo el naufragio. Las circunstancias del naufragio aún no se conocen.

Helena Maleno, portavoz del colectivo Caminando Fronteras, alertó sobre la partida de la embarcación desde Cabo Bojador y proporcionó su posición, instó a las autoridades españolas a intervenir con urgencia, considerando una "tortura" el hecho de que estas personas pasaran doce horas "suplicando" ayuda que no llegaba. Además, denunció que el área marítima donde ocurrió la tragedia está bajo responsabilidad española, según la legislación internacional, a pesar de que Marruecos reclame la titularidad de las aguas del Sahara Occidental.

Las autoridades españolas están siendo cuestionadas por activistas y organizaciones humanitarias, quienes afirman que han cometido una omisión en el deber de proteger y rescatar a las personas en peligro en el área marítima bajo su responsabilidad. Según la legislación internacional, esta zona de búsqueda y rescate (SAR) está bajo jurisdicción española, a pesar de las reclamaciones de Marruecos sobre las aguas del Sahara Occidental.

La búsqueda y rescate de embarcaciones en peligro no puede ser demorada, ya que las vidas de las personas en riesgo están en juego. Ante esto, es necesario que se implementen medidas más efectivas y rápidas para prevenir tragedias como esta y garantizar la seguridad de quienes emprenden peligrosos viajes por una vida mejor.