La naturalización en el deporte en México, sus implicaciones y debates

La naturalización es un proceso legal que permite a los extranjeros adquirir la nacionalidad mexicana y, en el ámbito deportivo, representa una oportunidad para que atletas de diferentes nacionalidades representen a México en competencias internacionales. Este proceso se justifica como una forma de fortalecer la diversidad y competitividad en el deporte nacional, aunque no siempre es el caso.

En México, existen diferentes tipos de naturalización: por residencia, por ser hijo de un mexicano, así como se puede obtener la nacionalidad por haber prestado servicios o efectuado obras destacadas en materia cultural, social, científica, técnica, artística, deportiva o empresarial, siempre y cuando se acrediten dos años con residencia temporal o permanente, de acuerdo con los artículos 20, fracción I, inciso d) de la Ley de Nacionalidad y 14 de su Reglamento.

Es importante señalar que el proceso de naturalización deportiva se rige por las leyes y reglamentos establecidos por la Federación Mexicana de cada deporte, en coordinación con las autoridades migratorias y deportivas del país, por tanto, deben contar con el aval de la federación correspondiente.

En cualquier tipo de naturalización los requisitos son los mismos, deben presentar la solicitud DNN-3 que se puede encontrar en internet; la tarjeta de residencia temporal o permanente; el acta de nacimiento; pasaporte, la identificación de la persona interesada, así como una carta bajo protesta de decir verdad en la que se señalen las entradas y salidas del país que ha tenido el promovente.

El trámite puede tardar tres meses, una vez que se tenga la opinión del Instituto Nacional de Migración de la Secretaría de Gobernación y tiene un costo de 5,595 pesos por la recepción, estudio y en su caso, expedición de la ciudadanía.

Controversia por naturalización en el deporte

La naturalización en el deporte mexicano no solo permite la incorporación de talentos extranjeros, sino que también implica un compromiso y un sentido de identidad hacia el país pues los atletas naturalizados representan a México en competencias internacionales contribuyendo al desarrollo y promoción del deporte, pero este proceso no está exento de controversias y debates.

Algunos sectores de la población señalan que se debe priorizar el desarrollo de talentos nacionales y limitar la naturalización de atletas extranjeros, pero otros defienden la incorporación de talentos abogando que enriquece la competitividad y promueve el intercambio cultural en el deporte.

Uno de los casos recientes y controversiales es el de Funes Mori, futbolista que gracias al proceso de naturalización pudo asistir al Mundial de Qatar 2022; a pesar de su llamado solo jugó doce minutos; casos similares han sido el de Guillermo Franco en Alemania 2006 y Sudáfrica 2010 o Antonio Naelson Sinha en Alemania 2006.

Por otro lado, existen casos destacables como lo es el de Randy Arozarena, pelotero cubano que es naturalizado mexicano y que jugó en el Clásico Mundial de Béisbol volviéndose toda una sensación, destacando aún más que el mexicano Julio Urías, quienes es lanzador de los LA Dodgers.

Otro caso relevante está en el baloncesto, con Juan Toscano Anderson, un atleta estadounidense naturalizado mexicano que podría jugar en la Copa Mundial de Baloncesto FIBA 2023 representando a México. Toscano Anderson, quien el año pasado fue campeón de la NBA con los Golden State Warriors y luego jugó brevemente para los Lakers junto a LeBron James, actualmente juega para Utah Jazz y es compañero de Lauri Markkanen, elevando su juego a un nivel alto.