Bloqueo de carreteras: ¿protección del libre tránsito o restricción de protesta?

El pasado viernes por la noche en la autopista México-Puebla, vecinos de Santa Rita Tlahuapan bloquearon la vialidad por la detención de dos personas que estuvieron involucradas en un linchamiento ocurrido meses atrás.

Dicha manifestación provocó que miles de automovilistas estuvieran varados por cerca de ocho horas, provocando afectaciones tanto a particulares como empresas que tenían que cumplir un itinerario.

Aunque no se trata del único caso de este tipo, muchas personas se preguntan si no existe algún tipo de sanción para las personas que, sin importar la causa, deciden bloquear una vía de comunicación afectando a terceras personas.

¿Existe alguna ley?

Sin importar si se trata de una causa justa, las protestas que implican el bloqueo de una vía de comunicación federal, es sancionado directamente por la Fiscalía General de la República.

Tapar un camino, carretera, área marítima, área ferroviaria o una red de telecomunicaciones, es considerado un delito que se denomina como “ataque a las vías de comunicación”.

Este delito se encuentra estipulado en el Código Penal Federal y por las múltiples implicaciones que representa tiene una sanción que puede ir de los 15 días hasta los 30 años de prisión.

¿Por qué no se aplica?

Aunque no es muy común escuchar la aplicación de esta ley, la razón se encuentra ligada a un tema social pues se encuentra en una línea muy delgada entre el derecho de las personas al libre tránsito y el derecho a la protesta.

En los últimos años podemos ver varios casos de personas que se han enfrentado al delito de ataques a las vías de comunicación pero que se encuentran ligados a movimientos sociales y que a través de este delito pueden ser encarcelados indefinidamente.

Mecanismos internacionales de protección a activistas han calificado este delito como una herramienta para criminalizar la protesta, reconociendo únicamente el derecho de las personas a manifestarse pero dejando de lado el derecho de las personas a transitar por una vialidad.

¿Y el uso de la fuerza?

Los grupos de granaderos, como se les conoce habitualmente, también han recibido críticas debido a que son el primer punto de contacto para dispersar una protesta o liberar una vialidad.

Los operativos menos exitosos han resultado en tragedias como el caso de San Bernardino Chalchihuapan en 2014, donde un menor de edad murió después de recibir un impacto en la cabeza con una lata de gas por parte de los granaderos.

En otros casos más exitosos, los granaderos han logrado evitar que los manifestantes tomen vialidades o que las liberen más rápidamente, aunque siempre a costa de ser objeto de agresiones por parte de los inconformes.

Es por eso que el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina hizo un llamado este lunes a la gente para que recurra al diálogo antes de bloquear una vialidad, en relación a los acontecimientos ocurridos en Santa Rita Tlahuapan.

El mandatario pidió a las personas que deseen manifestarse, acercarse a las autoridades antes de tomar una carretera o la autopista. Sin embargo, advirtió que cuando no haya más remedio, se tendrá que recurrir al uso de la fuerza para retomar el control de alguna vialidad.