Caída de árboles, ¿quién se hace responsable de los daños?

La recientes lluvias y ráfagas de viento han provocado que decenas de árboles caigan en distintos puntos de la capital poblana, situaciones que en el pasado han cobrado vidas, dejando personas heridas y cuantiosos daños materiales.

Pero cuando alguna de estas situaciones ocurre, muy pocas personas saben de qué forma deben de proceder o quién podría hacerse cargo de pagar los daños o las reparaciones físicas y morales.

¿Qué pasa en estas situaciones?

Lo primero que debes de saber es que la caída de un árbol es considerada parte de un desastre natural, pues propiamente el árbol es parte de la naturaleza y las causas por las cuales sucumbió también lo son.

Para la mayoría de las aseguradoras este tipo de daños provocados a viviendas o vehículos no son cubiertos, pues se considera que los desastres naturales son impredecibles y no es posible responsabilizar a la otra parte para que pague los daños.

Sin embargo, hay personas que desean estar prevenidas ante este tipo de situaciones y deciden ampliar la cobertura de sus seguros, lo cual es posible a través de varias empresas.

La cobertura ampliada permite al dueño de un automóvil o vivienda que resulte dañada por la caída de un árbol o algún desastre natural, como una inundación, recibir la reparación total del daño solamente cubriendo el costo de su deducible.

Los costos de una cobertura ampliada dependerán de cada una de las empresas aseguradoras y, en algunos casos, las mismas empresas fijan diferentes tarifas según la antigüedad de sus clientes o el número de servicios que tengan contratados.

Este tipo de seguros cubre no solamente los daños materiales, sino también se hace cargo de los gastos médicos o funerarios, en caso de que haya personas lesionadas o víctimas mortales dentro del vehículo o la vivienda.

Una forma de ejemplificarlo es lo ocurrido la semana pasada en el Bulevar Xonaca, donde un árbol cayó sobre un vehículo particular y un microbús del transporte público, dejando como saldo 8 personas lesionadas.

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Por los gastos médicos generados para la atención de cada uno de los lesionados, las aseguradoras de los vehículos fueron las que se encargaron de cubrir los daños, al menos en el caso del microbús, ya que las unidades del transporte público están obligadas a contar con un seguro de cobertura amplia.

¿Hay responsabilidad de las autoridades?

Imagen Poblana consultó en el Ayuntamiento de Puebla al fin de conocer si hay algún seguro o una bolsa económica determinada para cubrir daños, gastos médicos o gastos funerarios derivado de la caída de árboles.

Al respecto el área de Comunicación Social informó que la Secretaría de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Puebla no cuenta con ningún seguro que se haga cargo de cubrir daños a terceros en caso de que algún árbol caiga por viento, lluvia o de forma espontánea.

Sin embargo, muchas aseguradoras cubren los gastos de sus clientes cuando un árbol daña su propiedad, pero posteriormente estas empresas se encargan de proceder legalmente en contra de los gobiernos, municipales o estatales, con la finalidad de que les repongan los gastos erogados.

Se trata de un procedimiento legal por la vía civil que puede tardar semanas o meses, aunque los beneficiarios de un seguro de cobertura amplia no lo notan, pues a ellos se les paga de inmediato la reparación de su bien.

Gobiernos como el de la Ciudad de México sí cuentan con un seguro especial que cubre los daños de árboles cuando estos caen en vías primarias como pueden ser avenidas, circuitos o ejes viales.

Este seguro resulta muy benéfico para aquellos automovilistas o dueños de viviendas que no cuentan con un seguro de cobertura amplia, pues finalmente las autoridades se harán cargo de reponer el monto total por la reparación de los daños.

Cuando un árbol provoca daños a alguna persona que no está ni dentro de una vivienda o a bordo de un automóvil, no hay un procedimiento específico mediante el cual las autoridades tengan una obligación de cubrir gastos por lesiones o muerte.

Sin embargo, de los casos registrados se tiene conocimiento de que los gobiernos suelen cubrir parte de los gastos como parte de una responsabilidad civil, aunque no exista propiamente una regulación que marque de los pasos a seguir en este tipo de situaciones.