La justicia para Cecilia Monzón aún no llega a un año de su feminicidio

La justicia para Cecilia Monzón aún no llega a un año de su feminicidio

Foto: Enfoque

Ha pasado un año de que la abogada y activista Cecilia Monzón Pérez fue asesinada por dos sicarios que, presuntamente, fueron contratados por su ex pareja sentimental Javier L., político y exfuncionario que a un año de los hechos sigue detenido, pero sin recibir una sentencia justa por ser el autor intelectual de este feminicidio.

Es por ello que activistas, amigos y familiares de la víctima exigen que el Poder Judicial del Estado de Puebla apresure el proceso penal y evite cualquier acto de dilación que siga postergando una eventual sentencia condenatoria en contra del autor intelectual y de los dos sicarios que perpetraron el hecho.

 


El feminicidio

Haciendo un breve recuento del caso, recordemos que todo inició la mañana del 21 de mayo de 2022, cuando Cecilia Monzón circulaba a bordo de una camioneta particular de la marca Kia, sobre el Periférico Ecológico y el Camino Real a Momoxpan.

Al momento en el que ella ingresó a esta última vialidad, dos sujetos a bordo de una motocicleta de color negro le dieron alcance a la altura del puente vehicular y dispararon directamente en su contra al menos seis ocasiones.

Luego de lesionarla los dos sicarios huyeron nuevamente sobre el Periférico Ecológico y, de acuerdo con la Fiscalía General del Estado, llegaron hasta un domicilio en la colonia Universidades, en la capital poblana, donde dejaron la motocicleta para huir a bordo de una camioneta Dodge Durango.

Los peritos de la FGE se encargaron de las diligencias de levantamiento de cadáver y fue un par de horas después de que concluyeron que se dio a conocer que la víctima de este feminicidio era la abogada y activista Cecilia Monzón.

Aunque tenía un pasado político, a Cecilia Monzón se le recuerda por su activismo en favor de las mujeres pues se encargaba de ayudar a las víctimas de violencia vicaría que, como ella, peleaban contra deudores alimentarios o parejas y responsables que se negaban a hacerse cargo económicamente de sus hijos.

 



Los detenidos

El primero en ser detenido fue Jair, quien fue el encargado de conducir la motocicleta en la cual se perpetro el asesinato de Cecilia Monzón y que, posteriormente, sería identificado como sobrino de Javier L.

Aparentemente, su detención habría permitido señalar directamente al político priista como el autor intelectual, pues la Fiscalía informó que Jair fue contratado por su tío para asesinar a Cecilia Monzón, para lo cual él tuvo que contratar a otra persona.

El tercer implicado fue Silvestre, quien en las investigaciones aparece como el autor material ya que fue él quien accionó el arma de fuego en múltiples ocasiones para privar de la vida a la víctima.

Silvestre fue el último en ser detenido pues se encontraba oculto en el estado de Veracruz, a donde huyó después de perpetrar el crimen junto con Jair.

Por estos hechos también fue detenido Santiago Bárcena, exdelegado de la Secretaría de Relaciones Exteriores en Puebla y reconocido por su cercanía con Javier L.

De acuerdo con la teoría de la Fiscalía, Santiago le habría prestado a Javier L. una camioneta Dodge Durango que Jair y Silvestre utilizaron para darse a la fuga después de dejar la motocicleta en la colonia Universidades.


Pero después de varios amparos, el 20 de enero pasado Santiago Bárcena obtuvo su libertad luego de que quedó sin efecto el auto de vinculación a proceso que se le dictó como coautor material del feminicidio de Cecilia Monzón.

 


Santiago y sus familiares aseguraron que el único error fue ser amigo de Javier L., pues reconocieron que sí prestaron la camioneta, pero nunca supieron que sería utilizada con dichos fines pues presuntamente el priista la pidió para ir a una boda al interior del estado.

Un año sin sentencia

Además de la liberación de Santiago Bárcena, el proceso se ha ido alargando poco a poco y a un año del crimen los familiares de Cecilia Monzón continúan a la espera de que se inicie el juicio oral y se pueda llegar una sentencia.

El caso se ha ido dilatando también por otros aspectos, uno de ellos fue el traslado de Javier L. desde el Cereso de Tepexi de Rodríguez hasta el penal del Altiplano, en el Estado de México.

 



Tras su vinculación a proceso, pasaron más de seis meses para que finalmente se fijara fecha para la primera audiencia de la etapa intermedia, la cual se celebraría el 27 de febrero de 2023.

Sin embargo, por una falta de organización por parte del Tribunal Superior de Justicia, no se pudo asignar a un juez y la audiencia tuvo que aplazarse para el 22 de marzo, fecha en la que nuevamente no se pudo celebrar.

Finalmente la audiencia de la etapa intermedia se llevó a cabo hasta el 12 de abril y el 15 de mayo pasado, durante una nueva audiencia, un juez de control autorizó la acumulación de los procesos penales de los tres implicados.

De este modo Jair, Silvestre y Javier L. estarán en la misma causa penal y su situación legal seguirá resolviéndose al mismo tiempo, tanto en lo que queda de la etapa intermedia como al momento de llegar al juicio oral y la imposición de sentencia.

Se espera que con acumulación del proceso se pueda agilizar el trámite y antes de que concluya este año se pueda estar entrando en la etapa de juicio oral.

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