¡Un cambio total! Así sería la vida sin internet

El trabajo, estudio, entretenimiento, convivencia y hasta las relaciones amorosas, hoy en día la mayoría de las actividades cotidianas no pueden entenderse sin el uso del internet. Esta herramienta se ha vuelto imprescindible para el grueso de la población, por lo que ahora se hace difícil pensar la vida sin ella.

Cada 17 de mayo se celebra el Día Internacional del Internet por iniciativa de la Asociación de Usuarios de Internet y la organización Internet Society. La finalidad es informar y difundir sobre las posibilidades que ofrece la red para las nuevas tecnologías en diferentes áreas como el aprendizaje o la comunicación.

La sociedad se ha vuelto muy dependiente de la tecnología, pero principalmente de la conexión a internet, pues en la actualidad hay una gran cantidad de aplicaciones y servicios que ponen al alcance de la mano muchas facilidades. Las nuevas generaciones no se imaginan cómo sería la vida sin esta herramienta.

Por ejemplo, un celular con internet da la posibilidad de enviar y recibir mensajes y llamadas en cuestión de segundos, algo impensado en otros tiempos. Si no tuviéramos al alcance esto, tendríamos que recurrir nuevamente al uso de servicios postales, en los que la gente debía acudir a una oficina de correos para enviar una carta que podría tardar días en llegar y todavía más para obtener una respuesta.

El mismo caso aplicaría para enviar paquetes, pues se necesitaría hacer una carga más elaborada, cosa que hoy se puede evitar con las aplicaciones que ofrecen paquetería menor en cuestión de minutos y a costos más accesibles. Ambos escenarios parecen totalmente imposibles, pues hay quienes hoy ni siquiera saben lo que es un timbre o sobre postal.

Sin ningún tipo de conexión, la gente tendría que recurrir nuevamente al uso de casetas telefónicas o celulares con recargas para una simple llamada que estaría limitada por los minutos que se dispongan. WhatsApp, Telegram, entre otras, abren la ventana para que las llamadas se hagan con internet, incluso sin saldo en el teléfono.

Olvídate de Wikipedia y las miles de opciones que hay para la búsqueda de información en cualquier portal, pues red se tendría que regresar al empleo de los libros en físico y las visitas a las bibliotecas para consultar textos y enciclopedias.

Algo similar sucedería con la información periodística, ya que lo creemos como algo muy sencillo, pero habría que volver a comprar periódicos impresos, así como revistas y prácticamente cualquier otro recurso similar. La televisión volvería a ser también una de las fuentes de información más prominentes entre la sociedad, ya que los noticieros y programas oficiales estarían más al alcance de la gente.

Hacer trámites volvería a ser algo completamente caótico, como en un banco, con depósitos y transferencias que dejarían de hacerse mediante una aplicación móvil, sino que tendríamos que acudir nuevamente a las sucursales de los bancos. A pesar de todas las facilidades que da el internet, estas instituciones viven largas filas diariamente, por lo que su desaparición sería un caos cotidiano para todos los usuarios.

¿Ver una película? Nada de Netflix o plataformas de streaming, pues la opción sería volver a las salas de cine, hacer filas extensas para adquirir los boletos y, por si fuera poco, también checar la cartelera apenas unos minutos antes de entrar o, como se hacía en otros tiempos, revisándola en los periódicos.

Pero no solo esto, pues para ver una producción que ya no está en exhibición, la alternativa sería comprar un disco físico en DVD o Blue-Ray. Quizá muchos no lo sepan, pero hace no muchos años había lugares donde se podían rentar películas por cierta cantidad de días a módicos costos.

En YouTube, Spotify o páginas similares podemos disfrutar de una amplia gama de artistas y su respectiva música en cualquier momento, por lo que sin internet aún tendríamos que escuchar la música en CDs o vinilos que, si bien todavía se usan, no son ni de cerca las opciones predilectas de la gente que sí tiene conexión a la red.

La educación también ha hecho del internet una parte indispensable, por lo que los estudiantes y seguramente también los docentes, tendrían que arreglárselas con las investigaciones, una vez más en bibliotecas y ni pensar en hacerlo a distancia, las aulas seguirían siendo las únicas vías para que maestros y alumnos se encuentren para una cátedra.

De esta forma podríamos seguir planteando escenarios donde la vida de la humanidad cambiaría sustancialmente sin internet, pues es tan común que a veces ni siquiera somos conscientes de cómo lo usamos y qué haríamos sin él.