El 2023 se ha distinguido por una tendencia tecnológica, el desarrollo de Inteligencia Artificial (IA). A día de hoy, para mucha gente no suena ajeno el nombre de la plataforma ChatGPT, un sistema de lenguaje capaz de llevar a cabo todo tipo de tareas escritas, pero esta es solo una parte de lo que se ha desarrollado hasta el momento.
Las grandes empresas de desarrollo tecnológico se han concentrado en fabricar nuevos dispositivos en los que puedan integrar IA para ofrecer nuevas experiencias a los consumidores. En este sentido, Amazon, la compañía de Jeff Bezos ha lanzado su nuevo robot, “Astro”, que promete ser un artículo de usos múltiples para las labores de un hogar.
Este es un robot que sirve como asistente en casa, cuenta con un sistema de navegación para conducirse solo y es capaz de conectarse con el otro dispositivo de Amazon, Alexa, para monitorear la actividad del hogar. Sus funciones van desde pasar llamadas, mensajes, hacer recordatorios, programar alarmas, hasta vigilar a las personas en un inmueble, ideal para ver a niños a la distancia.
También es capaz de transportar objetos en una bandeja, se controla desde una aplicación en el teléfono y puede dispensar bocadillos para las mascotas. Para mayor seguridad, “Astro” está diseñado para detectar rostros ajenos y sonidos cuando la casa está sola, alertando a los propietarios de un posible intruso. Las nuevas generaciones de este asistente tendrán integrado un modelo de lenguaje similar al de ChatGPT para hacer más grande su gama de tareas.
Aunque esto suena a película de ciencia ficción, no es el único avance robótico o de inteligencia artificial que se ha elaborado en los últimos años. Las empresas llevan años trabajando en dispositivos revolucionarán la manera de trabajar en el mundo y desempeñar las labores cotidianas.
Fiel a su estilo de innovar, Tesla ya ha empezado a diseñar su propio asistente, el Tesla Bot. Este es un robot humanoide que tiene como propósito hacer las tareas inseguras o aburridas, para que los humanos se aparten de dichos trabajos.
Usará sistemas de IA similares a los que se ponen en los autos de la marca, sus dimensiones serán de 1.72 metros de altura y peso de 57 kilogramos, llegará a velocidad de 8 kilómetros por hora, levantará 68 kilos y transportará hasta 20.
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— DRAKOTAKO CHANNEL (@Drakotako) May 11, 2023
Su diseño será futurista y es parecido al que se pudo ver en la película “Yo, robot”, aunque Elon Musk aseguró que su robot será “amistoso y real”. En todo su “cuerpo”, el androide tendrá instalado una serie de motores y sensores que le permitirán ejecutar movimientos iguales a los de una persona. En su cabeza contará con cámara y sensores como los que tienen los autos para el manejo automático. Aunque Musk anunció que en 2022 saldría a la luz el primer prototipo, el Tesla Bot aún no está en circulación comercial.
Desde Hong Kong, la empresa Hanson Robotics ha desarrollado el androide más sofisticado de la actualidad, Sophia. Salió oficialmente en el 2016, aunque en ese entonces el plan inicial solamente era hacer una cabeza humana con facciones más realistas, que pestañee, haga movimiento de ojos y capacidad de mostrar expresiones faciales.
Sus capacidades cognitivas son reconocidas, pues es capaz de responder cualquier pregunta que le formules, recordar charlas del pasado y aprender de todas las interacciones que tiene. Tiene 62 expresiones faciales y ha generado su propio sentido del humor, además de que tiene reconocimiento facial gracias a un par de cámaras instaladas en sus ojos.
Las funciones para las que Sophia fue diseñada se enfocan principalmente en investigaciones de IA, pero también para trabajos en medicina y educación. Su desarrollo ha planteado controversia sobre las capacidades que pueden alcanzar los robots con inteligencia propia y su papel entre los humanos, ya que Sophia se convirtió en el primer androide en recibir la ciudadanía para ejercicio pleno de sus derechos en Arabia Saudita.
Uno de los desarrolladores líderes en la rama no se ha quedado atrás con la fabricación de robots avanzados que podrían reemplazar completamente a los humanos en trabajos. En Boston Dynamics se han encargado de crear el robot Atlas, capaz de ejecutar tareas de todo tipo, incluso con colaboración del Departamento de Defensa de Estados Unidos.
Puede resolver problemas como quitar obstáculos, arreglar caminos para cruzar de un punto a otro y mover escombros, así como transportar herramientas. En sus inicios, Atlas era un robot con movimientos torpes y poco ágiles, pero conforme lo fueron perfeccionando ahora tiene más fluidez en sus movimientos, incluso se le ha visto haciendo parkour, corriendo, equilibrándose, escalando estructuras y saltando. Apenas mide 1.5 metros y pesa 89 kilos, por lo que se espera que aún pueda tener muchas mejoras en el desplazamiento.
Con Dall-E o Stable Diffussion, el mundo vio una nueva forma de hacer arte con el apoyo de inteligencia artificial a partir de texto, pero esto también se ha transportado a la robótica con AI-DA, el robot artista. Es el primero de su tipo y puede pintar cuadros, hacer dibujos o hacer una obra gracias a su capacidad de aprendizaje autónomo.
Su funcionamiento se basa en dos cámaras que fungen como ojos y, al observar una imagen, pasa por sus procesadores para convertirla en una obra de arte. Algo que llama la atención es su rapidez, ya que puede crear un dibujo en un aproximado de 45 minutos seguidos. Desde su creación en 2019 por parte del especialista de arte, Aiden Meller y la empresa Engineered Arts, ha tenido presentaciones de sus pinturas en lugares como Venecia, Italia.