Coronación de Carlos III: así será la histórica ceremonia

Coronación de Carlos III: así será la histórica ceremonia

Foto: Xinhua

El pasado 8 de septiembre el mundo se estremeció con la noticia de la muerte de Isabel II, reina de Inglaterra. Después de un periodo de incertidumbre sobre la sucesión del poder, se declaró que el nuevo monarca del Reino Unido sería Carlos III, pero será hasta el próximo 6 de mayo cuando se lleve a cabo oficialmente su investidura y coronación.

 

El pueblo británico se está preparando para una ceremonia histórica en la familia real, pues han pasado más de 70 años desde el último cambio en el reinado. El protocolo es algo que se verá en todo el mundo, pero muchos lo desconocen debido a que lleva mucho sin ocurrir.

 

La celebración llevará por nombre operación "Orbe Dorado", esto por orden directa del Palacio de Buckingham y los servicios de inteligencia del Reino Unido. La ceremonia real empezará a las 10:20 AM, hora de Londres, con una cabalgata del rey Carlos III y Camila, en la que partirán desde Buckingham con destino a la Abadía de Westminster, donde la investidura iniciará a las 11:00 AM.

 

No será un recorrido común, pues se usará la carroza del “Jubileo del Diamante”, que fue hecha especialmente para la reina Isabell en 2012 por el 60 aniversario de su reinado, y será arrastrada por seis caballos provenientes de Windsor. Además, serán acompañados por un puñado de guardias de las Fuerzas Armadas Británicas.

 

 

Ya en Westminster, los futuros reyes entrarán al recinto a través de la Gran Puerta, ubicada en el oeste, donde descenderán de la carroza hasta estar en la parte central, donde se ubicará el altar oficial para la misa. Justin Welby será el arzobispo encargado de oficiar la ceremonia en la que se hará el juramento, la parte donde Carlos es presentado ante el pueblo junto a la silla de 700 años de antigüedad que perteneció al rey Eduardo (aún no podrá sentarse en ella).

 

Posteriormente se enunciará el juramento, en el que el arzobispo efectuará el reconocimiento de todas las religiones existentes y jurará como protestante fiel, respetando la ley de la iglesia inglesa.

 

Lo siguiente es el acto denominado como unción, quizá el más significativo, pues hasta dicho momento será cuando Carlos pueda sentarse en la silla de Eduardo, sumado a que el oficiante le untará aceite en la cabeza, el pecho y las manos en forma de cruz. Al igual que en la ceremonia de Isabel II, este momento será cubierto para hacerlo privado.

 

A continuación, se llevará a cabo el icónico momento donde se le pondrá la corona de San Eduardo a Carlos, convirtiéndose así en el séptimo monarca en usarla. También se le darán otras joyas como el orbe del soberano, el anillo de coronación, el cetro de la cruz y el cetro con paloma. En este lapso de tiempo sonarán las campanas y trompetas en la Abadía.

 

 

La parte final será la entronización, cuando el nuevo monarca ascienda al trono y los presentes se arrodillen para jurarle lealtad y besar su mano. A diferencia de otros años, en esta ocasión el único que se colocará en rodillas será el príncipe Guillermo, siguiente en la línea de sucesión e hijo mayor de Carlos.

 

Naturalmente, él no es el único protagonista del día, pues Camila, la reina consorte, también tendrá su rol en el ritual. A ella se le colocará la corona de la reina María, que tiene 2,200 diamantes incrustados, artilugio que no se usaba en más de 300 años, pues está reservada para algún consorte.

 

A manera de homenaje a la finada Isabel, la corona llevará algunas de sus joyas personales que solía usar en broches. Sin embargo, el emblemático y polémico diamante Koh-i-Noor, que fue extraído desde la India, no estará en la corona.

 

Junto a ellos estarán los presidentes de los países de la Commonwealth, gobernadores y primeros ministros, incluido el primer ministro inglés, Rishi Sunak, además de los reyes de España, Felipe y Letizia, sumando en total 2,000 asistentes de primer orden.

 

Una de las dudas era la posible ausencia del príncipe Harry, quien confirmó su presencia junto al resto de la familia real, algo que no se veía desde antes de la publicación del libro “Spare”, donde ventila los problemas de los monarcas. Quién no estará es Meghan Markle, pues permanecerá en California con sus hijos.

 

 

Después de la ceremonia, que terminará cerca de las 13:00 horas de Inglaterra, los reyes regresarán a Buckingham sobre la misma ruta en que llegaron a Westminster, esta vez en el carruaje de Estado Dorado. Ya en el palacio, se presentarán ante 3,800 asistentes, puntualmente veteranos, trabajadores del sector salud, de asistencia social y organizaciones benéficas que sostienen relación con la realeza.

 

Cómo es bien sabido, los lazos dentro de la familia real han estado tensos, por lo que aún no hay noticias ni una confirmación oficial sobre la ausencia o asistencia del resto de los integrantes en la presentación en el Palacio de Buckingham. Pese a que Harry sí estará en la ceremonia más importante, se ha dicho que regresará tan pronto como le sea posible a Estados Unidos, toda vez que uno de sus hijos, Archie, celebra su cuarto cumpleaños, lejos del resto de sus parientes.

 

Una de las figuras más polémicas que ya ni siquiera posee títulos reales o militares, Andrés, tampoco se dará cita, pues sus acusaciones de abuso sexual y la relación que tuvo con Jeffrey Epstein le valieron la separación de gran parte de la familia.

 

Las formalidades no se restringen únicamente al día 6, pues el domingo 7 se hará el almuerzo de coronación, donde el menú constará de quiche de espinacas, frijoles, queso y estragón, todo vegetariano a petición del rey, quien no come carne. Más tarde habrá un concierto con varios artistas como Katy Perry y el cantante de ópera Andrea Bocelli. Finalmente, el 8 de mayo se declara día feriado oficial en algunos sectores del país, donde se alentará a la población a servir como voluntariado y jurar lealtad al rey,

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