En Phoenix, Arizona existe una guardería clínica encargada de desintoxicar a los bebés que sufren síndrome neonatal de abstinencia. El uso del fentanilo en Estados Unidos se considera una epidemia, ya que dicho opioide altera áreas importantes del cerebro. Desafortunadamente, esta epidemia ya logró alcanzar a los más pequeños, causando adicción a recién nacidos.
Según datos del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades en Estados Unidos, de 2010 a 2017, aumentó 82 por ciento el número de bebés nacidos con síndrome neonatal de abstinencia. Mientras que en 2020, cerca de 6 recién nacidos experimentan abstinencia por cada 1.000 hospitales en el país norteamericano.
La doctora Suma Rao, directora del Centro Médico Banner en Phoenix, comentó que el porcentaje creciente de las cifras mencionadas de niños son evidencia de consumo de fentanilo por parte de sus madres. Algunos de los cuidados que proporciona la guardería Hushabye son espacios oscuros y calmados que requieren los bebés quienes padecen este síndrome.
Entre los síntomas de la adicción de fentanilo en recién nacidos están los temblores incontrolables, espasmos musculares y problemas para respirar, los cuales son similares a la abstinencia en adultos. El Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas (NIH) indica, el fentanilo afecta partes del cerebro.
Las partes afectadas por el opioide pueden ser el tronco encefálico, que controla funciones vitales como la frecuencia cardíaca, la respiración y el sueño. Debido a estas afectaciones se puede explicar por qué la sobredosis de fentanilo puede causar insuficiencia respiratoria y provocar la muerte.
Dentro de este contexto, Hushabye no solo busca desintoxicar a los niños nacidos de madres que consumieron drogas en su embarazo. También, la guardería proporciona tratamiento de desintoxicación para toda la familia, en caso de que se requiera debido a la epidemia de fentanilo. (Notipress)