En la medida que avanza el desarrollo de ciudades inteligentes y nuevos prototipos de vehículos conectados al internet de las cosas (IOT), hay mayores posibilidades para que la inteligencia artificial (IA) contribuya en la transformación de la industria del transporte. De acuerdo con cifras de Microsoft, en el año 2025 el 100% de los coches nuevos estarán conectados, y en 2030, el 15% serán autónomos, capaces de enviar, recibir y analizar grandes cantidades de datos.
En ese contexto, los expertos de Mobility de Sodexo México, comparten algunas de las transformaciones que tendrá la industria en los próximos años, a partir de la aplicación de la IA en distintos procesos:
· El transporte de mercancías será más eficiente: en la actualidad ya existen plataformas que permiten medir la frecuencia y consumo de productos en las cadenas comerciales. Esta data al interpretarse y usarla en los procesos de suministro permitirá a los responsables del transporte de mercancías obtener información para trazar rutas y abastecer las necesidades comerciales en tiempo y forma, de acuerdo con la demanda de productos que exista.
· Transporte autónomo, y no tripulado: será cada vez más frecuente encontrar transporte diseñado para ser conducido de manera autónoma, con altos estándares para garantizar la seguridad en carreteras. De acuerdo con la consultora KPMG, en su Índice de Preparación de Vehículos Autónomos 2019, ha enlistado los países mejor preparados en infraestructura para el desarrollo transporte autónomo, entre los que destacan: Países Bajos, Singapur, Noruega y Estados Unidos.1
· Reducción de costos: la recolección de datos y su posterior análisis por medio de IA hará factible encontrar los picos que representan una mayor generación de costos en la operación del transporte. En el estudio Global Truck Study 2018, de PwC,2 se estima que un vehículo autónomo mantendrá su circulación en un 78%, cifra que sobrepasa en 29% a un transporte de carga normal, por lo cual su tiempo de vida será más rentable.
· Reducción de accidentes: algunos indicadores como carreteras en donde ocurren mayores accidentes, o averías, así como la medición de factores climatológicos que puedan afectar en materia de conducción; al ser analizados y procesados por IA permitirán establecer protocolos de prevención y de mayor seguridad para los conductores.
En el caso de México es importante resaltar que aún hay grandes desafíos para la implementación de Inteligencia Artificial en la industria del transporte y muchos de estos dependerán del desarrollo de infraestructura y tecnología de vanguardia, que, al perfeccionarse y reducir costos para llevarla a cabo, generará importantes oportunidades para el sector.