Clonación de placas en Puebla, un delito que pasaría inadvertido

La clonación de placas es un delito que puede provocar severos problemas debido a que se trata de la alteración de un registro vehicular que permite a un vehículo circular con la documentación y datos que pertenecen a otra unidad.

Ya sea deliberadamente o sin el conocimiento de la persona, la clonación de placas se ha vuelto un problema común asociado a la venta de vehículos robados o al coyotaje de los llamados gestores en procesos para el trámite de placas, licencias de conducir y tarjetas de circulación.

¿Cómo se castiga?

Traer una placa clonada está previsto en el apartado de falsificación de documentos, tanto del Código Penal Federal como en el Código Penal del Estado de Puebla, donde se establecen los aspectos para identificar este delito y la sanciones que se le atribuyen.

En el caso del estado de Puebla, el artículo 253 Bis del Código Penal establece que cualquier persona que "elabore o altere sin permiso de la autoridad competente una placa, engomado, tarjeta de circulación o demás documentos que se expiden para identificar vehículos automotores o remolques, incurrirá en este delito".

El mismo artículo señala que la comisión de este delito amerita una imposición de una pena que va de los cuatro a ocho años de prisión, así como de 300 a 2000 Unidades de Medida de Actualización de multa, lo cual se traduce en una sanción económica de hasta 207,480 pesos.

El Código Penal establece que estas sanciones se le imponen no solamente a quien posea o utilice cualquiera de dichos documentos, sino también a la persona que los enajene o los expida, especialmente cuando hay conocimiento de que son falsificados o que se obtuvieron ilegalmente.

Incluso se prevé el hecho de que se pueda falsificar alguno de esos documentos para la venta de un vehículo robado, por lo que las penas tanto privativas de la libertad como económicas se incrementarán en una mitad, para esos casos.

Algunos ejemplos

Aunque son varios los casos que se han documentado, destaca uno que ocurrió apenas esta semana cuando a través de redes sociales una joven señaló que su hermana había sido víctima de este ilícito.

La usuaria en Twitter @JessicaPoloG publicó que en junio de 2022 su hermana adquirió un automóvil directamente en una agencia por lo que al momento en que lo recibió ya venía emplacado y con todos sus trámites vehiculares en regla.

En octubre de ese mismo año revisó la página oficial de fotomultas en Puebla y se percató que tenía más de cinco infracciones en este apartado, pero descubrió que la fecha y hora de la mayoría de estas multas correspondían a espacios en los que ella laboraba.

Fue así que al momento en que revisó cada una de ellas se percató que en la imagen captada por las cámaras de fotomultas correspondía a una camioneta, de un modelo y color completamente diferente al suyo, pero cuyas placas si eran iguales a las de vehículo de su hermana.

En ese momento lo primero que hizo la agraviada fue acudir al Centro Integral de Servicios (CIS) para exponer su caso con todas las evidencias reunidas, pero en respuesta únicamente le dijeron que no era posible localizar el otro vehículo ni reemplazar las placas de ella pues estaban asociadas al número de serie.

La agraviada incluso acudió a la Fiscalía General del Estado, pero lejos de que se iniciara una investigación por falsificación de documentos, le indicaron que no podían recibir una denuncia ya que en la camioneta no estaban cometiendo ningún delito, por lo que únicamente pudo elaborar una constancia de hechos.

Ante esta situación, la agraviada pidió la ayuda del Gobierno del Estado para una solución, pues en el Registro Público Vehicular el número de placas corresponde al vehículo tipo sedán adquirido el año pasado, lo cual quiere decir que la camioneta que aparece en la fotomultas estaría usando una matrícula clonada.

Esto puede traer complicaciones para la parte afectada, ya que en caso de que la camioneta que trae la matrícula clonada cometa algún delito, el número de placa la relacionaría directamente a ella, teniendo que explicar una situación de la que es completamente ajena, solamente porque se permite que la otra unidad circule con dicha matrícula.

Lo cierto es que se trata de un problema que se puede repetir en innumerables ocasiones y que lamentablemente muchos de los dueños no podrían darse cuenta a menos que se vean involucrados en una situación como la arriba descrita.