En Estados Unidos, las muertes por sobredosis de drogas se incrementaron entre 2020 y 2021, sobrepasando los 106 mil fallecimientos por esta causa, según sus Institutos Nacionales de Salud (NIH, en inglés). Del total, 70 mil 601 sobredosis fueron por opioides sintéticos, principalmente a causa del consumo de fentanilo, una sustancia cincuenta veces más fuerte que la heroína. No obstante, el impacto de esta epidemia varía según la región del país, pues los niveles de consumo son distintos de estado en estado.
Por ejemplo, Virginia del Este tuvo la mayor tasa de muertes por sobredosis de fentanilo en Estados Unidos, con 66 defunciones por cada cien mil habitantes en 2021, según USA Facts. Esta cifra es 44 por ciento mayor a la de Washington, DC, puntualiza la organización sin fines de lucro. Le siguen, en número de muertes por cada 100 mil habitantes, Delaware (41.6), Tennessee (40.6), Kentucky (38.3), Maryland (38), Maine (36.8), Connecticut (36.1), y Ohio (35.8). Por otro lado, el consumo de fentanilo en Dakota del Sur únicamente causó, ese año, 3.7 fallecimientos por cada 100,000 personas.
Sobre las causas de este gran número de sobredosis, destaca la potencia del fentanilo, del cuál bastan sólo 2 miligramos para causar una muerte segura, señala el Centro Nacional de Estadísticas del Abuso de Drogas de Estados Unidos. Los CDC también enfatizan el papel del consumo de fentanilo de manufactura ilícita, distribuido ilegalmente por sus efectos similares a la heroína y mezclado a menudo para abaratar la elaboración de drogas.
Recientemente, el secretario mexicano de relaciones exteriores Marcelo Ebrard recordó el papel de Estados Unidos y la prescripción legal de fentanilo farmacéutico en la epidemia de sobredosis. El funcionario recordó que, una vez aprobado su uso en 1968, el uso de fentanilo en aquel país se limitó estrictamente a algunas operaciones prolongadas y en cánceres avanzados. No obstante, desde 1996 y hasta su prohibición en 2013, se permitió a algunas empresas farmacéuticas su distribución en farmacias, provocando un aumento en su consumo por su potencial adictivo, aseguró Ebrard.
Durante la conferencia de prensa matutina del 4 de abril de 2023, el canciller mostró un mapa de los condados estadounidenses con las mayores tasas de prescripción de opiáceos. Según los datos de la Oficina de Responsabilidad de Gobierno, los condados donde más se prescriben opioides están en el sureste de Estados Unidos. Además, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, conocidos como CDC, especifican que Alabama, Arkansas, Tennessee, Luisiana y Kentucky encabezaron las tasas estatales de dispensación de opiáceos en 2020. Respectivamente, la tasa de expedición de opioides fue de 80.4, 75.8, 68.5, 68.3 y 68.2 por cada cien personas en aquellos lugares.
Frente a las acusaciones de Lindsey Graham, senador por Carolina del Sur, el gobierno mexicano adoptó como postura comunicar los hábitos de consumo de fentanilo en Estados Unidos. De esta forma, y principalmente por el tema de las prescripciones médicas, México se considera un país cooperante para la solución de la epidemia de fallecimientos por opiáceos y no el causante del problema, como asegura la campaña política del senador. (NotiPress)