Un partido de la segunda división del futbol húngaro se convirtió en el escenario de un hecho que ha causado la indignación de muchas personas, pues un portero evitó que un niño de siete años anotara un gol de manera simbólica como parte de su regalo de cumpleaños, por lo que se ganó el rechazo del público.
Todo ocurrió momentos antes del inicio del segundo tiempo entre el MTK Budapest y el DVTK Diosyor, cuando el equipo local quiso darle un anecdótico regalo al pequeño Enok Varga.
El niño entró al campo, se paró en la mitad de la cancha y comenzó a correr con el balón hacia el arco contrario. La idea inicial era que el niño anotara un gol y pudiera celebrar con todos los fanáticos en las gradas.
Lo que nadie esperó fue que el portero del equipo visitante, Zsombor Senkó, decidió detener los tiros del niño, evitando que anotara. Enok tuvo dos oportunidades para anotar, pero en ambas intervino el arquero, incluso, tras el segundo disparo, tomó la pelota y la pateó lejos para que el niño no volviera a intentarlo.
Ante la mirada de los fanáticos en las gradas, el pequeño fue sacado del campo en los brazos de su hermano. El video del insólito momento se hizo viral en redes sociales y las críticas hacia el portero no tardaron en llegar.
Las redes se llenaron de comentarios negativos hacia Senkó, pero más tarde, el padre del niño pidió públicamente que no lo atacaran. “Lo más importante es que no le guardemos rencor a Zsombor, de hecho, nos gustaría quedar con él para tomar un helado, seríamos felices y sería una historia positiva”, aseguró Béla Varga.
“Fuera de esta situación, es un deportista que tomó una mala decisión, pero queremos que sienta que la vida no se detiene con un error. Además, desde un costado del campo, desde el banquillo, lo incitaron a eso y le gritaron que lo detuviera. Zsombor ahora está crucificado, las personas que le gritaron desde el banco están en silencio, aunque deberían estar parados junto a él”, agregó.
Por otro lado, en el partido normal, el portero en cuestión recibió cuatro goles del MTK Budapest, que se quedó con la victoria por un marcador de 4 a 2. “Me quedó ahora más tranquilo que recibió 4 goles! Celebrémoslo!”, “Arquero desgraciado se comió 4″ o “Al desalmado Zsombor Senkó le enchufaron 4 goles. El karma como factor corrector. Poesía”, fueron algunos de los comentarios de los usuarios en redes.