Se ha reportado otro extraño hallazgo en Japón, pues una enorme bola de hierro anaranjada fue vista el pasado 28 de febrero en la costa de una playa, en la ciudad de Tokunoshima, por lo que ya son dos los objetos de este tipo que se encuentran en el país.
El artefacto, cuyo origen sigue siendo desconocido, fue hallado en una cueva tras ser arrastrado desde el mar. La esfera tiene un diámetro de 1.5 metros y varias abolladuras, además, está completamente oxidada.
De acuerdo con el funcionario de la administración local, Kazuo Okumura, podría tratarse de una boya, pues la comparó con la bola encontrada en la playa de la ciudad de Hamamatsu la semana pasada.
"Es tan pesado que no se mueve ni empujándolo. No es algo de lo que se pueda deshacer fácilmente", dijo. Las autoridades instaron a la población a no acercarse al lugar del hallazgo, pues hay acantilados y pasajes rocosos que representan un peligro.
Por otro lado, algunos expertos han explicado que la primera bola, encontrada en Hamamatsu, puede ser una boya de amarre que se soltó y se alejó flotando en el océano, pero a pesar de esto, surgieron diversas especulaciones de que se trataba de una antigua mina o un instrumento de espionaje.