Cada 28 de febrero se conmemora el "Día Mundial de las Enfermedades Raras", y se nombran de este modo por su baja prevalencia y el poco conocimiento que tiene la sociedad sobre las mismas. Uno de estos padecimientos es la espondiloartritis axial (EspAx), enfermedad que en Latinoamérica manifiesta una prevalencia de 0.2 a 0.9% en la población.
La espondiloartritis axial se considera la segunda enfermedad articular inflamatoria a nivel mundial, después de la artritis reumatoide. Es más frecuente en hombres (con una relación 3:1 en comparación a mujeres) entre los 15 y 40 años. Esto implica un impacto importante en la calidad de vida, ya que afecta comúnmente a personas en edad productiva, por su alto grado de discapacidad, originando problemas laborales y personales.
"Al iniciar como un dolor de espalda baja, mayormente en reposo y de duración mayor a 3 meses, las personas acuden a varias especialidades médicas y medicina alternativa antes de tener el diagnóstico definitivo, lo cual puede tardar hasta 13 años", manifestó el doctor Alberto Barragán Garfias, asesor médico para Reumatología y Dermatología para Lilly.
Se considera una enfermedad con un compromiso genético ya que en 18% de las personas existe historia familiar de la enfermedad; además se presentan factores ambientales que detonan la misma como infecciones, estrés biomecánico, tabaquismo, entre otros. En la columna se manifiesta como la fusión de las articulaciones sacroilíacas y posteriormente de las vértebras desde la zona lumbar hasta la cervical. Lo que provocará en el paciente dificultad para moverse o levantarse.
Diagnóstico y tratamiento
"Existen varias necesidades no satisfechas de los pacientes que padecen la enfermedad. Una de ellas es el diagnóstico, el cual debe efectuarse con una adecuada historia clínica y una exploración física con mediciones del movimiento de la columna, además de estudios de laboratorio (como los son los marcadores de inflamación, tales como la proteína C reactiva o la velocidad de sedimentación globular) o de imagen (radiografía o resonancia magnética)", detalló el doctor Alberto Barragán.
El doctor Barragán Garfias continuó: "el tratamiento de la espondiloartritis axial se basa en medidas generales desde cuidar el peso, practicar natación o efectuar ejercicios de columna, vacunarse y tomar medidas preventivas de infecciones. Dentro de los medicamentos que ayudan a mejorar la calidad de vida, además de evitar que la enfermedad avance se encuentran los antiinflamatorios no esteroideos y los fármacos biológicos como son los inhibidores del Factor de Necrosis Tumoral y los inhibidores de la Interleucina 17".
Quienes viven con EspAx, además de dolor en la espalda, 66% presentan fatiga por mala calidad del sueño; 79% vive con inflamación de las articulaciones; de 20 a 40% también viven con uveítis (inflamación del ojo que le impide ver, acompañado de dolor local y fotofobia), lo anterior provoca que de 13% a 36% de los pacientes abandonen sus actividades laborales; 45% cambien de trabajo por uno que les exija menos actividad física; y más del 40% tienen inestabilidad laboral.