Un hombre de oficio carpintero, murió tras recibir al menos siete disparos por parte de elementos de la Policía Estatal en la colonia Balcones del Sur. Los policías aseguran que era un presunto delincuente y que él disparó primero en contra de ellos.
Todo inició aproximadamente a las 22:40 horas del 21 de febrero, cuando vecinos de la referida colonia reportaron disparos y una intensa movilización policial desde la prolongación de la 3 Sur.
Después se informó que en la calle Mario Benedetti, casi esquina con la calle Gabriel García Márquez, había un hombre lesionado con múltiples disparos, por lo que se requería la presencia de una ambulancia para su valoración.
Los paramédicos valoraron a quien fue identificado como Miguel, de 37 años, quien estaba tirado en el piso, esposado y con al menos siete lesiones de bala, pero para ese momento ya no contaba con signos vitales.
Ya que también hubo intervención de la Policía Estatal y Municipal de Puebla, hubo momentos de confusión sobre la mecánica de los hechos pues inicialmente se reportó que la Policía Estatal tenía a un hombre detenido con una lesión de bala en la pierna.
De acuerdo con el dicho de los policías, Miguel iba con otro hombre a bordo de una motocicleta cuando fueron detectados en la calle 3 Sur por la Policía Estatal, señalados supuestamente de estar relacionados con hechos ilícitos, motivo por el cual les marcaron el alto.
La misma versión dice que Miguel y su acompañante no habrían hecho caso de la orden y siguieron su camino por lo que la Policía Estatal comenzó la persecución a la que se sumó la Policía Municipal de Puebla.
Supuestamente Miguel iba armado y les disparó a los policías, mientras que su supuesto cómplice siguió huyendo en la motocicleta para después abandonarla y lograr huir a pie.
Por ese motivo los Policías Estatales repelieron la agresión y fue así como hirieron a Miguel, para después esposarlo e incluso tratar de subirlo a una patrulla, aunque esto ya no se concretó pues el herido se desvaneció y minutos después murió.
Luego de enterarse de los hechos, la familia de Miguel que vivía a unos metros de donde ocurrió el enfrentamiento salió a encarar a los policías, señalando que él era carpintero y negaron que anduviera armado.
Peritos de la Fiscalía General del Estado se encargaron de hacer las diligencias de levantamiento de cadáver y asentar todos los indicios en la carpeta de investigación, con la finalidad de fincar o deslindar responsabilidades.
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