Con el objetivo de incrementar la tasa de natalidad, algunas provincias chinas están dispuestas a otorgar vacaciones pagadas hasta por un mes a las parejas recién casadas.
Gansu y Shanxi son algunas de las provincias del país asiático que están dando este tipo de prebendas para que los matrimonios se animen a tener hijos lo antes posible, informó este 21 de febrero el diario People's Daily Health, el diario oficial del Partido Comunista chino.
De acuerdo con el órgano informativo, Pekín accedió a que algunas administraciones locales aumenten los permisos, que usualmente eran de solo tres días. Ciudades grandes como Shanghái, por ejemplo, otorgan 10 días de vacaciones pagadas.
La medida es un nuevo intento de China por aumentar los nacimientos desde que en 2015 se pusiera fin a más de tres décadas de la política de hijo único.
"La extensión de la licencia por matrimonio es una de las formas efectivas de aumentar la tasa de fertilidad", comentó Yang Haiyang, decano del Instituto de Investigación de Desarrollo Social de la Universidad de Finanzas y Economía del Suroeste.
China finalizó el año 2022 con 1.411,75 millones de habitantes, frente a los 1.412,6 millones que se registraron a finales del año anterior. Fue la primera caída demográfica en el país desde 1961.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha estimado que la población china se contraiga en 109 millones de habitantes de 2022 a 2050, lo cual dejaría a la India como la nación más poblada del planeta.
En 1979, China introdujo la política llamada hijo único, que afectó al equilibrio entre sexos de la población. Esta medida fue tomada para evitar la superpoblación y la hambruna. Según esta política, las familias urbanas solo tenían derecho a tener un hijo, mientras que las rurales podían tener dos, pero solo si el primero era una niña.
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