Trabajadoras domésticas, entre la precariedad laboral y los malos tratos

Trabajadoras domésticas, entre la precariedad laboral y los malos tratos

Foto: Creative Commons

El trabajo doméstico es un espacio donde comúnmente las personas que desempeñan estas labores no tienen acceso a prestaciones de ley o al menos a un contrato formal. Se trata de un área donde principalmente se adentran las mujeres, quienes, en ocasiones, han tenido que iniciar desde pequeñas.

 

Así son las historias de Consuelo Sánchez y Avelina Romero, quienes, en entrevista para Imagen Poblana, detallaron que durante su labor en los hogares han vivido situaciones diferentes. Entre la informalidad laboral y lidiar con sus patrones, el trabajo doméstico se presenta como un ámbito en el que las trabajadoras no tienen ninguna garantía.

 

Por su parte, Consuelo se ha dedicado más a estar en casas, pero también se ha adentrado en escuelas y guarderías. Ahí se ha enfocado en las tareas de limpieza, preparación de alimentos, lavar ropa y cuidado de menores.

 

En sus vivencias, la gente para la que presta servicio es diferente, pues en su mayoría, se ha topado con personas que son amables y consideradas con ella. A diferencia de otras mujeres, a ella no se le exige que se quede a vivir en la casa y tampoco se le pide un mínimo de horas que deba cumplir, ya que casi siempre le solicitan que complete las labores y de inmediato puede regresar a su casa.

 

No obstante, hay personas que abusan de su situación informal y piden más de lo que le dan. Por ejemplo, mientras estuvo en una guardería en el área de cocina, la persona que dirigía este lugar le exigía que también llevara a cabo el quehacer en su casa, fuera del horario y sitio para el que se ofreció originalmente.

 

Entre las ocupaciones extras, le pedían que llevara comida para los hijos de la maestra y limpieza. Si se reusaba a cumplir, la patrona le retenía su pago y adoptaba actitudes groseras. “Era mi sueldo lo que era semanal, pero ella ya me metía más cosas y no habíamos quedado en eso”, aseguró Consuelo.

 

Al igual que muchas personas en esta área, no tenía ningún tipo de contrato o prestación laboral de las que le corresponden por ley. En caso de que sufriera algún accidente o se enfermara, los gastos salían de su propio bolsillo. “Cuando trabajé en la guardería sí me caí, pero no me dio ningún apoyo ni nada, en casas tampoco”, añadió la entrevistada.

 

A su consideración, el pago era justo en la mayoría de los casos, pues el tiempo que tardaba y los encargos hechos iban acorde al sueldo.

 

Por otra parte, Avelina se dedica a esto desde su niñez, específicamente desde los ocho años, para ayudar a sus padres. Puntualmente hizo labores básicas como ayudar en el cuidado de niños y tareas del hogar. Desde ese entonces, aproximadamente tiene ocho hogares en su haber.

 

Con ella la gente también ha sido muy diferente, pero su peor experiencia la vivió mientras trabajó para una familia en la Ciudad de México hace 42 años, pues eran muy minuciosos con las imposiciones. Cualquier accidente dado en la casa, culpa o no de ella, se lo atribuían y procedían a descontarlo de su pago.

 

 

El límite se trazaba con las agresiones físicas o insultos, pues relató que afortunadamente nunca le hicieron algo de esto a pesar de ser duros en su trato, contrastante con lo que pasa en la actualidad. “Hoy en día ya grande le doy gracias a dios, porque donde estoy ahorita me han tratado muy bien en todos los aspectos”, declaró la entrevistada.

 

Como es frecuente, no hay ningún contrato de por medio que la ampare, en ningún espacio donde ha trabajado. A raíz de esto, tampoco ha estado afiliada a ningún tipo de seguro médico ni le han dado apoyos por enfermedad. Lo más cercano a eso, es la familia para la que presta servicio hoy en día, quienes la mandaron a descansar a su casa en los meses de mayor intensidad de la pandemia de covid-19, pagándole su sueldo completo.

 

Ante el riesgo de un accidente en el área de trabajo, Avelina puntualizó: “hasta ahorita, gracias a dios, no me ha pasado nada de eso, pero con las personas que estoy ahorita yo creo que sí”.

Notas Relacionadas