Un estudio elaborado por los Institutos Nacionales de Salud (NIH por sus siglas en inglés) de EU, ha creado un anticonceptivo masculino oral bastante prometedor, pues podría usarse poco antes de tener relaciones sexuales y no tendría efectos permanentes en la fertilidad.
El tratamiento ha mostrado una alta efectividad para detener a los espermatozoides y prevenir embarazos. Así lo confirmaron los resultados obtenidos durante la fase preclínica con ratones.
De acuerdo con Jochen Buck y Lonny Levin, autores del trabajo, este descubrimiento podría revolucionar la contracepción masculina, que actualmente cuenta con las opciones de los preservativos o la vasectomía.
Los científicos contaron que inicialmente el objetivo de su investigación no tenía relación con la sexualidad, pues querían aislar una proteína importante para la señalización celular, la adenil ciclasa soluble (sAC), pero se dieron cuenta de que los ratones criados modificados genéticamente para no producir sAC eran estériles.
Posteriormente, la investigadora Melanie Balbach descubrió que los ratones que recibían un fármaco que desactivaba esta proteína producían espermatozoides incapaces de propulsarse hacia adelante.
De acuerdo con el artículo que presentaron, una única dosis del inhibidor de la sAC denominado TDI-11861 es suficiente como para inmovilizar el esperma durante dos horas y media, además, los efectos persisten en el interior del aparato reproductivo femenino una vez producida la eyaculación. Transcurridas tres horas tras la toma, los espermatozoides empiezan a recuperar la motilidad y a las 24 horas la fertilidad masculina estaría restablecida con normalidad.
Los ratones machos que recibieron el compuesto tuvieron un comportamiento sexual normal con las hembras, pero ninguna de ellas quedó embarazada durante los 52 intentos de apareamiento que se registraron.
Por otro lado, aquellos roedores que recibieron una sustancia inactiva de control sí lograron concebir con una de cada tres parejas.
Al respecto, Balbach explicó que uno de los puntos más importantes de su método anticonceptivo es la velocidad con la que se activa. "Nuestro inhibidor funciona a partir de los treinta minutos y durante una hora. Cualquier otro anticonceptivo experimental, hormonal o no, tarda semanas en reducir la cuenta de espermatozoides hasta volverlos infértiles".
Otro aspecto positivo es que para restaurar los niveles espermáticos en los hombres solo sería necesario esperar unas horas, lo que permitiría tomar decisiones sobre la fertilidad “día a día”. Los científicos indicaron que ya están preparando una gama de fármacos adecuados para el ser humano, además, repetirán las pruebas preclínicas en otro modelo para finalmente poder llevar a cabo los ensayos clínicos de rigor.