Si bien los salarios de la clase alta tienden a ser más del doble del promedio que los de la clase media, los que ganan más parecen tener incluso peores resultados en las pruebas cognitivas que aquellos que los siguen en salarios, reveló un estudio sueco.
Aunque las personas con altos ingresos, tienden a desempeñarse mejor en las pruebas de aptitud, esto es solo hasta cierto punto. Lo más sorprendente es que las personas con los salarios más altos incluso parecían pasar la prueba cognitiva con peores puntajes que los que estaban debajo de ellos, según descubrió un nuevo estudio de la Universidad de Linkoping en Suecia.
Esta investigación se basó en datos del registro sueco que contienen medidas de capacidad cognitiva y éxito en el mercado laboral de 59.000 hombres que tomaron una prueba de servicio militar obligatorio, y que, entre otras cosas, mide la comprensión de palabras, el pensamiento lógico y la percepción espacial.
"La gran cantidad de datos nos permite por primera vez probar si los ingresos extremadamente altos también están asociados con una inteligencia igual de alta", señaló el profesor de la Universidad de Linkoping, Marc Keuschnigg.
Si bien se estableció una fuerte correlación entre las habilidades cognitivas, como el análisis, la planificación y el salario para la mayoría de las personas, el equipo de investigación descubrió que, por encima de cierto nivel, las conexiones se debilitan y un salario más alto ya no indica una mayor aptitud mental superior.
Con un ingreso anual de aproximadamente 65.000 dólares, las diferencias parecieron nivelarse. El 1% de los que más ganan incluso pasó las pruebas con peores notas que los del grupo de ingresos inferiores.
Según la investigación, este descubrimiento puede ser crucial para el creciente debate sobre las desigualdades salariales, ya que los honorarios en la parte superior tienden a ser más del doble que los promedios en el rango inferior. En este debate perenne, los que más ganan a menudo tienden a justificar sus ganancias con sus habilidades "únicas". Sin embargo, al evaluar su aptitud cognitiva, el estudio no encontró "ninguna evidencia de que aquellos con los mejores trabajos y mejor pagados merezcan más sus ingresos que aquellos que solo ganan la mitad".
"Si bien la mayoría de las personas tienen salarios normales que corresponden claramente a su inteligencia individual, este no es el caso para el nivel superior", concluyeron los investigadores.
Del mismo modo, la investigación no encontró conexión entre la inteligencia y los diversos grados de prestigio que disfrutan algunas profesiones como contador, médico, profesor, juez o miembro del parlamento.
En una evaluación final del estancamiento de las capacidades intelectuales, los investigadores reflexionaron que "precisamente en la parte de la distribución salarial donde la capacidad cognitiva puede marcar la mayor diferencia, deja de desempeñar rol alguno".
"A medida que los salarios de los que más ganan aumentan constantemente en el mundo occidental, una parte cada vez mayor de los activos acumulados puede distribuirse de una manera que no está vinculada al factor de la capacidad cognitiva", enfatizaron.