Este fin de semana se volvió tendencia el nombre de Pablo Lyle, quien fue sentenciado a 5 años de cárcel por causar la muerte involuntaria de un conductor con el que tuvo un conflicto vial en Miami, Florida, Estados Unidos.
Sobre el caso, fue el 31 de marzo de 2019 cuando Lyle se involucró en un incidente automovilístico con un ciudadano cubano identificado como Juan Ricardo Hernández, a quien golpeó en el rostro y parte de la cabeza, provocando que cayera y se pegara.
Tras varios días hospitalizado, Juan Ricardo Hernández perdió la vida y autoridades de Estados Unidos procedieron a la detención de Pablo Lyle por el delito de homicidio, por el cual fue sentenciado este fin de semana.
Pero el caso de Pablo Lyle es más común de lo que parece, pues si bien en muchos casos los resultados no son fatales, sí se han dado violentos conflictos viales que terminan con lesionados.
Los casos
Un caso con resultados fatales que se ha registrado en Puebla ocurrió el 20 de noviembre de 2017 cuando Felipe N., un instructor de la Academia de Policía Estatal, le disparó a un hombre que le reclamó en un incidente vial.
Los hechos ocurrieron en la Avenida Juan de Palafox y Mendoza, donde la víctima murió y días después se logró la identificación del responsable, que fue detenido y actualmente continúa preso por homicidio.
Aunque no con los mismos resultados, en Puebla se han reportado otros hechos similares, por ejemplo el pasado 5 de enero de este año cuando un taxista baleó a un automovilista por un conflicto vial.
Los hechos ocurrieron en la avenida 16 de septiembre, a la altura de la calle 109 Oriente, en Arboledas de Loma Bella, donde la víctima quedó esperando apoyo, mientras que el responsable se dio a la fuga.
El 26 de julio del 2021, un conductor de una pipa recibió dos balazos en las piernas por parte de un automovilista con el que sostuvo una pelea por un hecho de tránsito. El lesionado fue llevado a un hospital mientras que el responsable fue detenido posteriormente.
Estos hechos, cuando la víctima resulta con lesiones, se investigan cómo dolosos, pues el atacante actúa de forma alevosa, mientras que en el caso de Pablo Lyle se ha argumentado que fue de forma culposa.
