El exgobernador de Puebla, Mario M., fue trasladado hacia la famosa cárcel federal de Almoloya de Juárez, en el Estado de México, como parte de un reacomodo solicitado por las autoridades de Quintana Roo, donde estaba preso por las acusaciones de tortura cometidos en contra de la periodista Lydia Cacho.
De acuerdo con medios de la región, el traslado de Mario M. se llevó a cabo junto con el de Jean S., empresario acusado de pederastia y amigo del "góber precioso", que también estaba preso en una cárcel de Cancún.
Mario M. y Jean S. fueron trasladados desde la península hasta el Estado de México para hacer reubicados en el Centro Federal de Readaptación Social del Altiplano, en el Estado de México, donde se ubican otros personajes de la política poblana como Javier L., detenido por el feminicidio de Cecilia Monzón.
Mario M., acusado de tortura, fue catalogado por las autoridades penitenciarios de Quintana Roo como de alta peligrosidad o alta prioridad, por lo que su traslado se hizo en un convoy donde presuntamente también fueron reubicados al menos un centenar de presos.
Aunque Mario M. y Javier L. estarán dentro del mismo centro penitenciario, los amigos y excompañeros del Partido Revolucionario Institucional no deberían de encontrarse pues una de las medidas de seguridad es limitar lo más posible la interacción entre los internos.
Asimismo, este reacomodo que se está dando dentro de los penales federales obedece a las medidas tomadas por el gobierno federal para despresurizar algunas prisiones y evitar hechos violentos como los que se han registrado en cárceles como la de Ciudad Juárez.