La socialité Paris Hilton ha sido la portada de tabloides durante muchos años por su extravagante vida y más de un escándalo farandulero, recientemente regresó a las portadas por otro tema controversial como puede ser la maternidad subrogada, pues todo apunta a que la millonaria mujer decidió tener a su primer hijo a través de este procedimiento.
La maternidad subrogada, de acuerdo con la Suprema Corte de Justicia de la Nación, es un contrato a través del cual una mujer acepta estar para una persona o pareja que tiene la intención de fungir como padre o madre de la niña o niño nacido de dicho embarazo.
El proceso de subrogar la maternidad se lleva a cabo a través de técnicas de reproducción asistida como la inseminación artificial diseñadas para personas o parejas que quieren tener un hijo biológico, pero que por diversas razones, no pueden ejercer la maternidad y paternidad solos, ya sea por temas como la infertilidad o para parejas del mismo sexo.
Este tema ya fue abordado por la SCJN en 2021 por la falta de una regulación para llevarla a cabo de forma efectiva, situación que concluyó en que cada estado tiene la obligación de establecer la regulación por el proceso de la maternidad subrogada.
A casi dos años de dicho fallo, solo Tabasco y Sinaloa tienen en su Código Civil una regulación específica para la maternidad subrogada, aunque esto ha traído consigo controversia, ya que algunos sectores de la sociedad consideran que no se ha abordado este tema desde todos los puntos de vista.
Esta falta de regulación permite que muchas clínicas ofrezcan este tipo de procedimientos y al no haber reglas, prácticamente cualquier persona puede acceder a ellas, ya sea alguien soltero, una pareja heterosexual donde alguno de los dos tenga problemas de infertilidad, una pareja homosexual, e incluso lo pueden hacer personas no nacidas en México.
La falta de tabuladores también permite a las clínicas cobrar prácticamente la cantidad que ellos consideren justa, es por eso que en México puedes encontrar sitios que cobran por este procedimiento desde 25,000 hasta 300,000 pesos, donde se incluye desde la renta del vientre hasta el proceso de inseminación.
De acuerdo con algunos estudios llevados a cabo a partir del debate sobre si se debe regular o no la maternidad subrogada, se reveló que es la mujer que alquila su vientre quien se lleva la menor parte del pago, pues en promedio reciben entre 5,000 y 10,000 pesos por este proceso.
Las asociaciones civiles preocupadas por la regulación de este tema señalan que una mayor legislación permitiría a las mujeres que alquilan su vientre mejores condiciones económicas para ellas, pues se han documentado casos donde incluso la transacción se hace de forma particular y están sujetas a lo que la pareja o persona que va a alquilar el vientre determine.
Otro punto a tratar en la maternidad subrogada es la validez de los contratos que se firman al momento de alquilar el vientre, ya que algunas organizaciones señalan que ante la falta de una regulación federal, dichos contratos no tienen la validez necesaria, aunque hasta el momento no se han documentado casos donde alguno de los contrayentes haya decidido impugnar.
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