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Las autoridades del zoológico Furuvik, ubicado en Gavle, Suecia, informaron que cinco chimpancés escaparon de sus jaulas, por lo que decidieron abatirlos a tiros para evitar posibles daños a los visitantes. Tres ejemplares fallecieron durante el incidente.
Tras percatarse de que los animales habían escapado, los responsables del parque dieron aviso a los servicios de emergencia y a la Policía, por lo que comenzó una búsqueda que incluyó el uso de drones, mientras que el resto del personal y los visitantes fueron puestos a salvo.
Annika Troselius, vocera de prensa del parque, señaló que la decisión de matar a los chimpancés tuvo que ver con el hecho de que no tenían suficientes tranquilizantes para todos. "Teníamos veterinarios en la escena, pero evaluaron que no teníamos suficiente anestesia. Por eso llamamos a los tiradores", dijo.
"Toda esta situación es trágica en todos los sentidos posibles. Asumimos toda la responsabilidad", agregó, a la vez que explicó que el principal objetivo de la operación fue que "ningún humano resultara herido".
Por otro lado, la vocera explicó que además de los tres ejemplares muertos, uno más resultó herido y un quinto regresó por su propia voluntad a la jaula. Finalmente, las autoridades iniciaron una investigación para determinar cómo los animales lograron salir del lugar de cautiverio, mientras que la policía está investigando los hechos como una posible violación a la Ley de Bienestar Animal.
