México llegó al Día de los Derechos Humanos en medio de una crisis, pues actualmente la Comisión Nacional de los Derechos Humanos ha dejado de lado su verdadero fin y su titular, Rosario Piedra Ibarra, ha adquirido un perfil encaminado más a la política.
El Día de los Derechos Humanos se celebra cada 10 de diciembre, en conmemoración a que en 1948 la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH).
La DUDH es un documento que proclama los derechos inalienables que corresponden a toda persona como ser humano, independientemente de su raza, color, religión, sexo, idioma, opinión política o de otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición.
En el caso de México, la protección y defensa de los derechos humanos en México fue elevada a rango constitucional el 28 de enero de 1992, con la publicación del Decreto en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Actualmente la CNDH tiene diferentes facultades que se centran en recibir, conocer e investigar quejas de presuntas violaciones a derechos humanos y procurar la conciliación entre las personas quejosas y las autoridades señaladas como responsables.
Además, tiene como atribución el impulsar la observancia de los derechos humanos en el país, pero es en este último punto donde evidentemente el organismo atraviesa por una severa crisis bajo la gestión de Rosario Piedra Ibarra.
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Una de las críticas más recientes en contra de la CNDH y de su titular, es justamente su omisión ante las distintas reformas que favorecen la militarización del país, a través de la presencia del Ejército en las calles.
Pero la CNDH bajo su gestión también ha sido omisa a pronunciarse sobre casos de desaparición forzada, por el desabastecimiento de medicamentos que viola el derecho de las personas a la salud, el asesinato de periodistas y el abuso de la prisión preventiva oficiosa.
Los partidos de oposición han recalcado que esta omisión se debe principalmente a la cercanía que tiene Rosario Piedra con el presidente Andrés Manuel López Obrador, lo que le ha dado a la CNDH un uso más político que verdaderamente social.