El análisis del lenguaje corporal se ha convertido en uno de los temas de moda debido a algunos personajes que se asumen como expertos, tal es el caso de María Fernanda Centeno Muñoz, mejor conocida como Maryfer Centeno, quien se dedica a analizar el lenguaje corporal de las celebridades.
La mujer, que se describe como perito grafóloga y grafóscopa, ha saltado a la fama como escritora, pero más recientemente por sus intervenciones en programas matutinos de la televisión, donde lleva a cabo análisis de algunas celebridades al momento de ser entrevistadas o dar alguna declaración.
Sin embargo, hay que señalar que la interpretación del lenguaje corporal no es como tal una ciencia y deriva más de algunos análisis sicológicos, lo cual no significa que este tipo de comunicación no sea real, aunque no deja de ser meramente subjetiva.
El lenguaje corporal está presente si lo vemos como parte de la vida humana, a través de actividades que hacemos de forma inconsciente como puede ser la sonrisa, el llanto, el dolor, entre otras expresiones que tienen una relación con la lengua hablada.
La mayoría de las personas que se basan en el estudio del lenguaje corporal tienen como referencia máxima al sicólogo social Albert Mehrabian, quien a finales de 1960 elaboró un estudio sobre lenguaje oral en la Universidad de California.
Su análisis, fundamentado en el análisis de 17 mujeres, señaló que sólo 7 % de un mensaje emocional se transmitía a través de palabras, mientras que 38 % a través del tono de la voz y el otro 55 % mediante las señales no verbales.
Este estudio alcanzó niveles insospechados y por ello su autor se ha dedicado durante los últimos años a pedir que se haga una valoración objetiva del mismo y no se utilice casi como un evangelio para los analistas de lenguaje corporal.
En este sentido, hay que destacar que el estudio en cuestión también establece que la interpretación de lenguaje se da en el contexto en el que está cada persona, de ahí la subjetividad que tiene su interpretación, pues dependiendo de la situación y del individuo es que podría haber una connotación diferente al momento de hacer una expresión.
El lenguaje corporal como tal no es utilizado en otras ciencias más allá de la sicología, tampoco tiene un peso importante en análisis criminológicos, de ahí que solamente se utilice el polígrafo como uno de los mecanismos para saber si una persona está mintiendo.
De este modo podemos decir que el lenguaje corporal puede ser muy acertado o nada acertado, pues no hay una forma de medir su certeza, ya que finalmente se intentan interpretar los pensamientos de una persona, lo cual volvería a los intérpretes unos clarividentes.