La carrera por la sucesión presidencial parece que solo se enfoca en la definición del candidato del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), pues todos los reflectores se van en lo que hagan o dejen de hacer los suspirantes a esta posición y a ocupar el lugar de Andrés Manuel López Obrador.
De esta manera y a la vieja usanza priista, solo se espera el “dedazo” del presidente para que se entregue la candidatura a su preferido a continuar el proyecto de nación que tiene. En estos momentos, parece que Claudia Sheinbaum es la favorita por encima de Marcelo Ebrard.
Pero la llamada “Cuarta Transformación” está olvidando que tendrá rivales en la oposición, que si bien es cierto no generan en estos momentos el impacto mediático que los antes mencionados, serían en campaña unos auténticos dolores de cabeza para el oficialismo.
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Debemos comenzar con la panista Lilly Téllez, quien ha levantado la voz en el Senado y se ha mantenido con reservas en su interés por ser candidata a la presidencia; sin embargo, en caso de ser la elegida por Acción Nacional para esta candidatura, sin duda sería un hueso duro de roer que le podría arrebatar votos a la 4T.
Siguiendo con los presidenciables panistas hay que mencionar al senador Damián Zepeda, quién ha mantenido un discurso congruente y que seguramente cuando llegue el momento de las definiciones levantará la mano para la candidatura presidencial, siendo un aspirante fuerte de la oposición.
No podemos dejar de lado a Ricardo Anaya, que a lo lejos busca mantenerse vigente en el mapa electoral y en caso de ser candidato del PAN tendrá de su lado a esos millones de mexicanos arrepentidos de haber votado por López Obrador.
Un presidenciable del que poco se habla y sería una tremenda piedra para la 4T es el senador Ricardo Monreal, que evidentemente ha roto su relación con MORENA y se coloca como un político serio que podría ser abanderado por cualquier partido, contando con estructura suficiente para pelear por la presidencia.
En Movimiento Ciudadano también hay posibles candidatos que podrían dar la sorpresa y sin duda el más fuerte es el alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio Riojas, que ya con el nombre lleva un gran respaldo social y que sería determinante para una posible candidatura.
Aunque suene descabellado, el PRI también tiene un nombre en específico que podría ser una opción fuerte y nos referimos a la senadora Claudia Ruiz Massieu, quien es de las priistas que mantiene una actitud crítica hacia dentro y fuera del tricolor, siendo una posible candidata que podría pelearle a la 4T.