En el sexenio de Enrique Peña Nieto, la llamada “Estafa Maestra” fue el escándalo de corrupción que más impactó al reciente gobierno priista de México, tema por el que la sociedad levantó la voz y exigió castigo a los culpables de este desfalco.
En la “Estafa Maestra” resultó un completo escándalo el desvío de 5,000 millones de pesos en contratos ilegales con universidades y otras acciones de Desarrollo Social, donde como principal responsable se señaló a Rosario Robles.
Pero la “Estafa Maestra” es nada comparado a lo que se vive actualmente en el caso de Seguridad Alimentaria Mexicana (SEGALMEX), donde se ha superado por completo el fraude visto en el sexenio de Peña Nieto, por lo que se considera a este caso como la “Estafa Maestra” de la Cuarta Transformación.
Primero debemos definir que SEGALMEX es un organismo descentralizado, sectorizado a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) que busca la autosuficiencia alimentaria en los cuatro granos básicos (maíz, trigo, arroz, frijol) y leche, con el fin de fomentar el desarrollo económico y social del país.
Esta definición suena atractiva, pero oculta para lo que verdaderamente fue ocupada SEGALMEX, pues desde que inició la investigación a esta dependencia en 2020, dos años después de que asumió la presidencia Andrés Manuel López Obrador, se ha detectado un desfalco de 10,000 millones de pesos.
La red de corrupción que habría operado en SEGALMEX se basó en la operación de contratos ilegales, dejando hasta el momento a 53 señalados y una treintena de denuncias. Lo más grave es que la cifra por operaciones irregulares en la adquisición de leche, trigo y grano podría ascender hasta los 12,000 millones de pesos.
Hasta el momento solo se están tomando en cuenta los referidos contratos ilegales, pero de acuerdo a diversas investigaciones periodísticas, hay desfalcos en otros rubros como la compra de gasolina, organización de eventos y hasta en la elaboración de productos lácteos.
En 2020 se informó que SEGALMEX dotó de combustible a 246 vehículos, pero jamás justificó el consumo por unidad ni recibió del proveedor una lista de las estaciones que darían el servicio. El fraude en este rubro sería por más de 93 millones de pesos.
En el tema de la elaboración de productos lácteos se habría hecho un pago millonario, pero sin acreditar a la empresa que prestaría este servicio, derivando en un desfalco de 55,2 millones de pesos.
Por todo lo anterior, el “cochinero” llamado SEGALMEX estaría superando de manera sustancial lo visto en la “Estafa Maestra”, pero hasta el momento no se ha procesado penalmente a todos los que estarían implicados en este gran fraude en épocas de la “Cuarta Transformación”.