Un pueblo con tendencia agrícola y de difícil acceso, así se puede definir a Badiraguato, Sinaloa, aunque esta población ubicada a las orillas de la sierra y justo en el triángulo conformado por Sinaloa, Durango y Chihuahua, es más conocida como la tierra de los narcos.
En el “pecado” lleva la penitencia Badiraguato, pues este lugar vio nacer a Joaquín Guzmán Loera, alias el “Chapo”, además de sus socios en el Cártel de Sinaloa, Ismael “Mayo” Zambada y Juan José Esparragoza, mejor conocido como el “Azul”.
Y aunque de acuerdo a cifras oficiales el 75 % de la población de Badiraguato vive en la pobreza, los habitantes se consideraron felices durante mucho tiempo gracias al éxito que tenía en el mundo del narcotráfico Guzmán Loera, al que conocen en este lugar como el “Viejón”.
Tal es el cariño y reconocimiento que tienen por este narcotraficante que el pueblo vivió una fiesta cuando el “Chapo” logró fugarse de la cárcel en el sexenio de Enrique Peña Nieto. Jóvenes, adultos y hasta niños destaparon la cerveza y prendieron cigarros de mariguana para celebrar el momento.
En 2015, la mitad de la población de Badiraguato sembraba mariguana. Solo se acercaban a algún miembro del cártel y recibían un radio para irse a la montaña a producir esta planta, pero todo indica que esto ha cambiado en la actualidad.
Aunque las autoridades locales quieren enterrar el nombre de Joaquín Guzmán, la gente sigue considerando al “Chapo” como un héroe local que ha llevado a cabo obras en beneficio de la sociedad, además de que saben que en este lugar aún habita la madre del capo, a quien consideran una persona amable y muy religiosa.
Y es precisamente la madre del “Chapo” la que ha despertado la polémica en torno al presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ha visitado en cinco ocasiones Badiraguato, en una de estas saludó personalmente a la madre de Guzmán Loera, en algo que quedó en video.
López Obrador niega que sus visitas a este lugar sean para reunirse con las cabezas del Cártel de Sinaloa, pero llama la atención que ningún presidente se había parado por este lugar antes del actual mandatario, que asegura no se debe estigmatizar a esta población.
Pese a que tiene razón en su argumento, no deja de causar controversia que López Obrador esté tan interesado en estar en Badiraguato, pues pese al programa “Sembrando Vida”, las carreteras y otras obras que se hacen en este lugar, se sigue considerando como una tierra de narcotraficantes.