El ex fiscal general de México Jesús M. (2012 y 2015), procesado y en prisión por tres cargos relacionados con la desaparición en 2014 de 43 estudiantes de magisterio de la escuela rural de Ayotzinapa, fue sometido a una cirugía de urgencia el 20 de octubre, confirmó este lunes la defensa.
"Los estudios practicados al licenciado revelaron otra carótida obstruida, por tanto, se espera que los médicos a cargo determinen el tratamiento a seguir y si es necesario una nueva cirugía, ya que el estado de la arteria mencionada eleva el riesgo de un coágulo cerebral", dijo en un comunicado José Javier López García, responsable de la defensa particular del exfuncionario federal.
El exprocurador, de 74 años de edad, fue detenido el 20 de agosto, un día después de que la nueva Comisión de la Verdad del Caso Ayotzinapa señalara en un informe que la versión de los hechos dada por el exfuncionario estaba plagada de irregularidades, entre ellas tortura a imputados, manipulación de la escena del crimen y falsas evidencias.
Murillo Karam se mantiene hospitalizado en terapia intensiva tras ser sometido a una cirugía del sistema cardiovascular, por una arteria carótida obstruida bajo el estatus legal de prisión preventiva por el llamado Caso Ayotzinapa.
El acusado salió del Reclusorio Norte el 19 de octubre para una valoración médica en el Hospital General de Xoco de la Ciudad de México, y un día después fue trasladado al principal centro de atención de enfermedades cardiológicas para ser intervenido de urgencia.
Luego de presentar problemas de salud, Jesús M. fue intervenido el 20 de octubre en el Instituto Nacional de Cardiología con una cirugía de emergencia denominada "endarterectomía carotídea de alto riesgo", mediante la cual se extrae quirúrgicamente de una arteria la placa o coágulo que la obstruye.
Los médicos valoran la posibilidad de una segunda operación en los próximos días, debido a que existe el riesgo de un coágulo cerebral.
La Fiscalía General acusa al exprocurador de "urdir y disfrazar" la llamada "verdad histórica" sobre el caso, que ha sido desacreditada por nuevas pesquisas.
"Con la verdad histórica, usted de manera dolosa truncó, frustró y descartó otras líneas de investigación e impidió que los familiares de los estudiantes desaparecidos accedieran a la información y a la justicia", dice la imputación judicial.
Murillo Karam bautizó su investigación como "verdad histórica", según la cual un centenar de jóvenes que viajaba desde la escuela de Ayotzinapa a la capital del país a participar en la marcha conmemorativa anual de la masacre de estudiantes del 2 de octubre de 1968, fueron atacados a balazos por patrullas de policías municipales en la ciudad de Iguala, en el sureño estado de Guerrero.
En el ataque murieron seis personas, decenas resultaron heridas, 43 jóvenes fueron detenidos y después entregados al grupo criminal Guerreros Unidos.
Según esa versión de Jesús M., los estudiantes fueron asesinados, sus cuerpos incinerados en el basurero municipal a cielo abierto de Cocula, pueblo vecino de Iguala, y los restos fueron lanzados al riachuelo San Juan.