Como si el covid-19 no fuera suficiente, México enfrenta un riesgo médico más en la gripe aviar, específicamente la H5N1 que, de acuerdo con la Organización Mundial de Sanidad Animal, es una de las cepas más infecciosas de esta enfermedad.
El primer caso fue detectado a través de un ave silvestre durante su ruta migratoria en el municipio de Metepec, Estado de México, por lo que las autoridades ya encendieron las alarmas respecto a esta cepa que se une a otros casos que se tenían registrados en México a través de la variante H7N3.
La gripe aviar es principalmente un riesgo para el sector avícola, ya que se trata de una enfermedad que ataca principalmente a las aves, aunque también puede alcanzar a los humanos que tienen contacto con las especies infectadas, de ahí que sea un virus de especial vigilancia.
El contacto con aves infectadas es el principal riesgo para los seres humanos, quienes pueden presentar síntomas relacionados a los de un resfriado típico como puede ser tos, fiebre, dolor de garganta, dolor de cabeza, fatiga muscular, así como dificultad para respirar.
Pero es para el sector avícola donde existe el mayor riesgo, pues que se trata de una enfermedad que puede provocar pérdidas económicas de grandes dimensiones, y es que al ser altamente infecciosa puede provocar la muerte de miles de aves en cuestión de semanas.
Tan sólo en Europa, la gripe aviar está registrada por lo menos 37 países, siendo España el caso más grave donde incluso ya se registraron los primeros casos positivos en humanos, y aunque solamente puede ser mortal para las aves, las especies infectadas tienen 60% de probabilidades de morir cuando se infectan de este virus.
Y aunque ya hay un caso de H5N1, México padece principalmente la otra cepa de la gripe aviar, la H7N3, la cual es considerada menos infecciosa pero no deja de ser peligrosa pues tan solo en el 2012 provocó que aproximadamente 22 millones de gallinas de granja tuvieran que ser sacrificadas.
En el caso de Puebla, hay que recordar que hay una importante industria avícola se encuentra en la región de Tehuacán, donde existen granjas especializadas en la crianza de aves para consumo humano, así como para producción de huevo.
La industria avícola de Puebla es considerada una de las más importantes del país, por lo que a raíz de las grandes pandemias que han existido de gripe aviar, existe un control sanitario estricto en estas regiones para evitar la propagación del virus.