Esta semana fue inaugurado en Puebla el Congreso Internacional sobre Derechos Humanos, reunión donde se busca visibilizar la importancia de estos derechos en todo tipo de sociedades, a fin de que los gobiernos y autoridades pongan por encima de todo el respeto a estas garantías individuales.
Pese a que se habla mucho de estos derechos, pocas personas saben a ciencia cierta qué son y cómo pueden ser violentados, motivo por el que muchas veces los abusos a la dignidad de algunos ciudadanos quedan impunes.
Los derechos humanos son el conjunto de garantías sustentadas en la dignidad humana, que resultan indispensables para el desarrollo integral de la persona. Están establecidos dentro del orden jurídico nacional, en la Constitución y en tratados internacionales.
Todas las personas tienen derechos humanos, sin importar nacionalidad, lugar de residencia, sexo, origen étnico, color, religión, lengua, o cualquier otra condición. Todos tenemos las mismas garantías, sin discriminación alguna. Estos derechos son interrelacionados, interdependientes e indivisibles.
Entre los que más se deben destacar tenemos el derecho a la vida, a la educación, a la vivienda, a la salud y a la alimentación. También resalta el derecho a la igualdad, a la libertad, a la seguridad, a la libertad de expresión, a la libertad de tránsito, libertad religiosa y acceso a la justicia.
De esta manera, hay situaciones donde estos derechos son vulnerados, siendo la discriminación uno de los principales ataques que se dan a estas garantías individuales, pues aún en nuestros tiempos vemos como se segregan a personas por su raza, condición social e incluso preferencia sexual.
La represión es otro de los actos “cotidianos” que van en contra de los derechos humanos y aquí debemos incluir las mordazas que gobiernos y gente de poder coloca a periodistas. De la mano va la violencia que se vive día a día en el país contra diversas personas
Atentar contra la dignidad humana es una violación a estos principios que casi no se toma en cuenta, motivo por el que vemos en la actualidad en redes sociales infinidad de mensajes de odio que terminan por denigrar a ciertos individuos por su manera de pensar.
El negarle educación a un niño y atención de salud a ciudadanos, así como desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales y tortura son otros de los grandes atentados a los derechos humanos que se siguen presentando en México.