El uso de cubrebocas en Puebla ha pasado a ser una medida que ya no es obligatoria, pese que a nivel nacional continúa activa la emergencia sanitaria por la pandemia del covid-19, que actualmente está saliendo de su quinta fase de contagios.
De acuerdo con el gobernador Miguel Barbosa Huerta, el uso del cubrebocas ya es una decisión personal, incluso reveló que él ya no lo utiliza en espacios abiertos, no obstante, respeta a quienes continúan portándolo.
La utilización de mascarilla para evitar contagios fue implementada de forma permanente hasta principios de este año y posteriormente se emitió un decreto para hacerlo voluntario.
Pero ante la llegada de la quinta ola de covid-19 a Puebla, el Gobierno del Estado nuevamente retomó la obligatoriedad de esta herramienta, principalmente en los espacios cerrados o de alta afluencia de personas.
A pesar de que actualmente no es una obligación portarlo, es posible ver que en calles, centros comerciales, oficinas de gobierno, comercios y sobre todo en escuelas sigue siendo usado por la mayoría de las personas.
Algunos de forma consciente y otros por costumbre, lo cierto es que muchos poblanos siguen portando el cubrebocas como una forma de protegerse de una infección de coronavirus o de algún otro tipo de enfermedad respiratoria que se puede transmitir por vías aéreas.
Esta situación contrasta con los problemas que costó al principio de la pandemia hacer que la gente usara las mascarillas de forma responsable, pues el Gobierno del Estado tuvo que hacerlo obligatorio a través de un decreto.
En redes sociales circulaban videos de personas quejándose por individuos que de forma irresponsable decidían andar por la calle sin utilizarlo o usándolo de forma incorrecta, de ahí que ahora destaca el hecho de que muchas personas lo sigan llevando sin que sea obligatorio.
El problema del covid-19 en México continúa, pues de acuerdo con las últimas cifras oficiales del gobierno federal, durante el 13 de septiembre se registraron 329,811 defunciones en todo el país, así como 7’062,822 contagios.
Estas cifras muestran que tan sólo en 24 horas se contabilizaron 44 defunciones y 2,886 nuevas infecciones; sin embargo, la incidencia de casos activos en todo el país va a la baja en comparación con los niveles más altos que hubo en el 2020 y 2021.
También hay que resaltar que la estrategia del cubrebocas funcionó por la presión social en algunos espacios públicos como los centros comerciales, plazas y el transporte público, donde muchas veces los encargados son los que le piden a la gente que lo sigan portando.