La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado que el aumento del tiempo que se pasa en espacios interiores y las actividades que implican una “visión de cerca” están provocando que un mayor número de personas padezcan miopía.
Este padecimiento es un defecto visual del eje anteroposterior con un crecimiento del globo ocular, que suele aparecer en la edad escolar y se incrementa gradualmente a lo largo de la vida. En concreto, afecta la visión de lejos, mientras que los objetos cercanos permanecen nítidos.
Los tratamientos comunes para esta condición son el uso de lentes o una cirugía que cambia la forma de la córnea para que pueda enfocar la luz claramente; sin embargo, la posibilidad de revertir la miopía llevando simplemente unas gafas está cada vez más cerca.
La empresa japonesa, Kubota Pharmaceutical, acaba de lanzar al mercado unos lentes especiales que prometen reparar los ojos y restablecer la visión normal. Se trata de las Kubota Glass, que utilizan unos nanoproyectores que hacen brillar algunas luces muy pequeñas en la retina de los ojos para simular un desenfoque a gran distancia, lo que obliga a las personas miopes a enfocar objetos distantes.
Este método busca entrenar al ojo para soportar la deformación axial de los globos oculares, por lo que, de acuerdo con sus creadores, tras un tiempo de uso estos vuelven a sus formas normales, restableciendo la visión.
Los desarrolladores recomiendan usar los lentes un par de horas al día durante una especie de entrenamiento visual. Gracias a la última tecnología de realidad aumentada, el dispositivo crea “un entorno de imagen que te hace sentir como si estuvieras mirando a lo lejos, incluso cuando estás en casa”.
En Japón, las Kubota Glass se venden a un precio de 770,000 yenes (cerca de 5,550 dólares), aunque la compañía ha dicho que si los usuarios no quedan 100 % satisfechos, se les hará un reembolso íntegro del importe de las gafas.
Aún se requieren pruebas a largo plazo para evaluar detalladamente la efectividad de este revolucionario invento, aunque estudios hechos anteriormente señalan que sirven al menos para frenar la progresión de la miopía.
