Actualmente podemos ver un estado climático alterado si lo comparamos con las condiciones de hace apenas unas décadas, pero los cambios son cada vez más rápidos y nos acercan a los peores escenarios posibles.
La humanidad perdió muchos años en la discusión sobre el cambio climático, una realidad que en un principio fue rechazada por un impulso anónimo de las grandes industrias, pero que ante el evidente deterioro de la tierra se tuvo que reconocer.
Las mismas empresas que en un principio lo negaron, hoy reconocen el cambio climático y además lucran con él, pero socialmente ya estamos viviendo efectos primarios de este problema como es el aumento en la temperatura y las irregulares lluvias alrededor del mundo.
Pero si estas problemáticas no son suficientes, a continuación, te dejamos algunos de los efectos que en un futuro no muy lejano podría traernos la crisis ambiental y que pese a sonar apocalípticos, tienen un sustento de instancias como la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
¿Qué es el cambio climático?
En primera instancia, debemos establecer que el problema del cambio climático deriva de las emisiones de gases de efecto invernadero que cubren la Tierra, atrapan el calor del Sol y provocan el calentamiento global.
Una mayor producción de gases por combustibles fósiles ocasiona que el mundo se caliente más rápido que en cualquier otro momento de la historia del que haya registros, además, las temperaturas más cálidas están cambiando los patrones climáticos y alterando el equilibrio normal de la naturaleza.
¿Cuáles son los efectos más peligrosos?
En general, todos los efectos del cambio climático deben de ser considerados peligrosos y una amenaza general al planeta, pues influyen directamente en el ecosistema; sin embargo, hay algunos que podrían repercutir negativamente de forma más rápida.
Hoy ya sufrimos diversas consecuencias como el aumento de las temperaturas y tormentas más potentes, además las sequías están haciéndose más comunes, pues la disponibilidad de agua se ha modificado y escasea en más regiones.
Uno de los efectos que más deben de preocuparnos son el aumento del nivel del océano y calentamiento del agua, provocado porque el mar absorbe la mayor parte del calor generado y a medida que se calienta, su volumen aumenta porque el agua se expande, elevando su nivel y amenazando a las comunidades litorales e insulares.
Otra consecuencia preocupante es la desaparición de especies, ya que debido a la potencia del cambio climático exacerbado en el mundo se están extinguiendo a un ritmo 1,000 veces mayor que en cualquier otra época, provocando que un millón de especies están en riesgo de desaparecer en las próximas décadas.
Esta crisis ambiental también traería a la humanidad una inevitable escasez de alimentos, pues los recursos pesqueros, los cultivos y el ganado pueden desaparecer o volverse menos productivos debido a una continua acidificación oceánica y al calor extremo que puede hacer disminuir el agua y los pastizales destinados a la ganadería, provocando una reducción de la producción agrícola y afectando al ganado.
Lo anterior también repercute en efectos sociales como la pobreza y el desplazamiento, por ejemplo, las inundaciones pueden arrasar barrios marginales, destruyendo hogares y comunidades; el calor dificulta la ejecución de trabajos en el exterior; mientras que la escasez de agua puede afectar a los cultivos.
De acuerdo con datos de la ONU, los cambios relacionados con el clima desplazaron a un aproximado de 23.1 millones de personas en países que son más vulnerables y están menos preparados para adaptarse a los efectos del cambio climático.
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