En el marco del Primer Congreso Educación Financiera en México, rápidamente llamó la atención el término “estrés financiero”, un problema del que se habla desde hace algunos años pero que, aparentemente, ha existido desde hace mucho tiempo en las familias mexicanas.
De acuerdo con Óscar Rosado Jiménez, presidente de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), el estrés financiero se ha convertido en una “pandemia silenciosa” que afecta a la mitad de los mexicanos.
Este nuevo término se produce como consecuencia de los problemas económicos que generan ansiedad y producen sensación de vulnerabilidad o escasez, impactando directamente en la salud de las personas provocando insomnio, depresión, alteraciones del sistema inmune o problemas cardiovasculares, entre otras afecciones.
El término ya es usado por las empresas bancarias que ofrecen a sus usuarios cursos de educación financiera, que hasta el momento es una de las alternativas para reducir los efectos que genera una mala administración del dinero que llega a nuestros hogares.
¿Es un problema nuevo?
Rosalía tiene 48 años y administra una cocina económica al sur de la ciudad de Puebla; ella reconoce que por momentos sí ha estado bajo algunos síntomas del llamado estrés financiero por la crisis económica, pero no es algo nuevo.
Ella tiene 4 años con su negocio, pero reconoce que el momento más complicado ha sido los últimos dos años, primero por el cierre que tuvo que hacer por casi tres meses cuando empezó la pandemia del covid-19, pero ahora por las secuelas económicas de la pandemia.
"Muchos de mis ahorros se fueron en sobrevivir tres meses con mi negocio cerrado, pero aún no puedo recuperar ese dinero porque la clientela sí ha bajado, mucha gente se hace cargo de su comida y ya no puede comer fuera", expone en entrevista con Imagen Poblana.
Tras explicarle lo que es el estrés financiero, Rosalía concuerda en que es un problema muy común, pero señala que no es algo nuevo y existe desde hace mucho tiempo, pues considera que incluso sus padres lo sufrían pese a que los tiempos eran muy distintos.
En su caso, nunca ha tenido interés por los bancos y los términos a los que hace alusión la educación financiera; sin embargo, práctica conceptos básicos como el ahorro, no usa tarjetas de crédito y tampoco ha tenido que recurrir a préstamos o créditos, lo cual muchas veces es lo que provoca endeudamiento en las personas.
Cómo atender el estrés financiero
De acuerdo con el centro de educación financiera de BBVA, lo primero que conviene hacer es analizar la situación y enfocarse en los aspectos que causan más estrés financiero.
"La mejor herramienta para localizar la raíz del problema es un presupuesto detallado con el que hacer un seguimiento de los ingresos y gastos, comprobar en qué partidas se puede recortar para afrontar las posibles deudas y si hay algún gasto más superfluo que pudiera eliminarse", señalan.
Además del análisis financiero, también se recomienda detectar comportamientos peligrosos, por lo que otro paso puede ser buscar ayuda de algún psicólogo para atender problemas más delicados.
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