La herbolaria es considerada una de las prácticas más añejas en la historia de la humanidad, pues antes del nacimiento de los medicamentos, era a través de las infusiones que muchas personas aliviaban sus malestares, algo que se vio reflejado en los casos moderados de COVID-19.
La evolución de los virus, así como el avance de la ciencia, ha provocado que en la actualidad sea casi imposible sobrevivir a una enfermedad solamente con el consumo de un té.
Esto no significa que estas infusiones no sean útiles para aliviar malestares comunes como el dolor de cabeza, de estómago, el cansancio, el resfriado o afecciones menores.
En el caso del COVID-19, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha sentenciado en todas sus recomendaciones que se deben de omitir los tratamientos caseros, incluidos los tés.
No obstante, existen algunas infusiones que pueden ser un auxiliar para aliviar algunos síntomas, más no erradicar la infección por el SARS-CoV-2, como pueden ser el ardor de garganta, el dolor de cabeza o el dolor de cuerpo generalizado.
Té de limón
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Esta bebida tiene un gran arraigo principalmente en México ya que la planta de la que está hecha se produce principalmente en territorio nacional y es muy recomendada para combatir enfermedades bacterianas, pues refuerza el sistema inmune.
Entre las características principales del té de limón está en que favorece a pacientes con hipertensión, por lo que es visto como un buen auxiliar en el tratamiento de estos padecimientos, por ello es que puede usarse en pacientes con síntomas leves de COVID-19, solamente como una ayuda que no sustituya el tratamiento médico.
Te de jengibre
El té de jengibre contribuye en el control de cólicos y dolores menstruales, pero su fama principalmente se debe a su efectividad para ayudar a reducir los malestares estomacales derivados de una infección.
También es común que se recomiende tomar una taza de esta infusión cuando la persona está atravesando por un cuadro gripal y de garganta inflamada, pues ayuda a bajar la inflamación.
Té de Manzanilla
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Uno de los tés más comunes y que sin duda muchas personas tienen en sus alacenas es el de manzanilla, el cual es muy común para el tratamiento de muchas dolencias por sus propiedades antiinflamatorias.
Esta bebida atiende los problemas gastrointestinales, por lo que es muy común que se recomiende su consumo cuando existe un malestar en el estómago.
En el caso del COVID-19, debería de ayudar a los pacientes a reducir el dolor corporal y generalizado, siempre y cuando se esté siguiendo ya un tratamiento prescrito por un doctor.
Té de Canela
La canela tiene uno de los sabores más característicos entre las infusiones expuestas hasta el momento y al igual que la manzanilla, es utilizada como un auxiliar en el tratamiento de enfermedades estomacales.
Como característica principal, destaca por ser recomendado en pacientes con problemas relacionados con la glucosa, pues ayuda a mantener los niveles adecuados en la sangre.
El té de canela es muy recomendado para pacientes con síntomas de gripa y tos, por lo que personas con síntomas ligeros de COVID-19 también podrían tener sensaciones de mejoría al beberlo.
