El número de estadounidenses que busca en el mercado de México medicinas y servicios de salud más baratos ha crecido en los últimos años, generándoles ahorros anuales en torno a los 1.000 dólares, de acuerdo con un estudio universitario.
En promedio, en los últimos 15 años las medicinas han costado un 40% más baratas en México que en Estados Unidos, identificó la Universidad de Texas en El Paso en un análisis firmado por Thomas M. Fullerton y Steven L. Fullerton .
Durante 2018, la prescripción de medicamentos en Estados Unidos alcanzó los 335.000 millones de dólares, un gasto virtual que motivó a los ciudadanos de ese país a buscar opciones de adquisición en México tanto en persona, cruzando la frontera, como por internet.
"Hay evidencia sustancial que confirma de manera consistente que farmacéuticas de patente son significativamente más caras en Estados Unidos que en México y muchos otros países", señalaron los investigadores.
A pesar de contar con aseguramiento médico, lo que genera interés en el mercado farmacéutico estadounidense no sólo entre habitantes de ciudades aledañas a México, como El Paso, Texas, sino incluso entre pobladores de Canadá, Florida y otros sitios de la Unión Americana, identificó Fullerton.
Una mujer entrevistada por el medio local El Paso Matters asegura que una consulta médica en Estados Unidos puede costar hasta 300 dólares, mientras que en territorio mexicano puede acceder a la misma atención por 10 dólares.
La persona consultada, identificada como Olaya, asegura que cruza de El Paso a Ciudad Juárez, Chihuahua, alrededor de dos veces al mes para conseguir atención médica más barata.
Además, existen farmacias en Ciudad Juárez que no sólo venden medicamentos sino que cuentan con consultorio médico para la atención de pacientes, entre los que es frecuente encontrar inclusive canadienses.
En 2007, mediante el documental Sicko, el polemista estadounidense Michael Moore demostró cómo la especulación financiera de las farmacéuticas y las estratagemas legales de las compañías de seguro para no cubrir sus pólizas abandonan a la ciudadanía a la vulnerabilidad médica y sanitaria.