
Puebla es una de las entidades con más panaderías en el país y eso demuestra la importancia que tiene la industria panificadora para sus habitantes. El impacto de este alimento en la dieta de las familias es tal, que no deja de consumirse a pesar de que sufra aumentos de precio.
"Es como la Coca (Cola), aunque suba de precio es algo que difícilmente dejaremos de consumir, al menos en mi casa no lo veo viable porque mi esposo y mis hijos piden pan casi todos los días", señaló la señora Irma en entrevista con Imagen Poblana.
Según la Unión de Pequeños y Medianos Industriales del Pan (Upmipan), para este 2022 no se prevé un nuevo aumento en el precio del pan en Puebla, pues se hizo un ligero ajuste a principios del año.
El precio de la harina pega en el pan y los tamales https://t.co/Gzp4HrrFV8
— Imagen Poblana (@ImagenPoblana) June 11, 2022
Pero debido al aumento constante de los insumos para la elaboración de este alimento, principalmente la harina, el precio del pan se muestra volátil a nivel nacional.
La importancia del pan
De acuerdo con la Secretaría de Economía Federal, en el país la ingesta per cápita anual de los derivados de harina como el pan blanco y dulce es de 33.5 kilos, que si bien es alto, no es mayor al de países como España (45 kilos) y Francia (54 kilos).
En el caso específico de Puebla, estamos dentro de las siete entidades con mayor número de unidades económicas dedicadas a la fabricación o venta de pan. El Estado de México, Veracruz, Oaxaca, Ciudad de México, Sonora y Michoacán son las otras regiones que lideran esta industria.
Renuentes a dejar el pan
La señora Irma señaló que diariamente gasta entre 30 y 50 pesos cuando va a la panadería, ya que compra de cinco a seis piezas de pan dulce y el mismo número de tortas.
"Los días que estuvo lloviendo eran diario unos 50 pesos, y aun cuando hace calor es muy común que compre tortas para mi esposo, porque le pongo para el trabajo y para la escuela a mis hijos”, explica la señora Irma.
Para ella, un nuevo aumento del precio de este alimento sería dañino para su economía, pero duda mucho dejar de comprarlo ya que es parte de su vida diaria, por lo que quizá su única alternativa sería cambiar de panadería por una más barata.
"Me gusta el pan de la panadería a la que voy, pero pues igual y si le volvieran a subir yo creo que pensaría en cambiar de panadería antes que dejar de comprarlo. Hay un lugar que vende la pieza un peso más barata, pero su pan es más pequeño y más insípido", expuso.
El pan, culturalmente, también es parte importante de la vida de los mexicanos pues está presente en muchas festividades, como el caso del Día de Muertos con las hojaldras; el Día de Reyes con la Rosca y hasta la Navidad y Año Nuevo con las tortas.