A dos años de que se llevan a cabo las elecciones para renovar la Presidencia de la República, los destapes siguen a la orden del día en los diferentes partidos políticos, siendo los suspirantes de la llamada “Cuarta Transformación” los que más han levantado la mano.
De un tiempo a la fecha, se ha tomado la costumbre de llamar “corcholatas” a cada uno de los nombres que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha puesto como posibles candidatos de Morena a la presidencia, poniéndoles a nivel de fichas que pueden ser eliminadas o cuidadas.
Entre estas “corcholatas” debemos nombrar a Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Juan Ramón de la Fuente, Esteban Moctezuma, Tatiana Clouthier y Rocío Nahle como posibles candidatos a ocupar el puesto que en 2024 dejará vacante López Obrador.
Sin embargo, hay un nombre que en estos momentos más que “corcholata” debe ser tomado como un “tapón de vino” y este es Marcelo Ebrard Casaubón, quien tras la Cumbre de las Américas reforzó su imagen para ser considerado como el presidenciable más fuerte.
Y es que contrario a su más cercana competidora, Claudia Sheinbaum, los bonos de Marcelo Ebrard van al alza con cada acción que encabeza como canciller tanto en México como en el plano internacional.
De destacar es que Marcelo Ebrard limpió un poco el nombre de México en la Cumbre de las Américas, luego de que el presidente López Obrador se negara a asistir porque no se invitó a naciones como Cuba y Venezuela, dejando la representación de México en el canciller.
“Ningún país tiene derecho a imponer a otro cómo gobernarse”: Ebrard https://t.co/AZmCQyGpEH
— Imagen Poblana (@ImagenPoblana) June 7, 2022
Marcelo Ebrard entregó una participación de altura donde contundentemente, pero de manera respetuosa, criticó el bloqueo de Estados Unidos a otros países, confiando que sea la última vez que esto sucede.
Sin amenazas y aspavientos, Ebrard Casaubón se colocó en esta Cumbre de las Américas como la “corcholata” más importante de cara a la sucesión presidencial, pese a que no es precisamente el favorito de López Obrador.
Mientras tanto, otros suspirantes de la “Cuarta Transformación” van dando pasos en reversa en una carrera que parece está ganando ampliamente el canciller Marcelo Ebrard.