La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnud) condenó este miércoles los recientes asesinatos de dos personas defensoras de derechos humanos en México.
La representación permanente del organismo internacional deplora los asesinatos de "la defensora de derechos humanos y abogada Cecilia Monzón Pérez, ocurrido el 21 de mayo, en San Pedro Cholula, Puebla; y del defensor del derecho a la tierra y territorio y de los derechos del pueblo afromexicano, Humberto Valdovinos Fuentes, ocurrido el 23 de mayo, en Pinotepa Nacional, Oaxaca".
Monzón Pérez, asesinada por hombres armados que viajaban en una motocicleta cuando ella conducía su vehículo, "era una reconocida defensora de los derechos de las mujeres".
La abogada de víctimas de violencia por causas de género "había solicitado en múltiples ocasiones protección del estado a raíz de las numerosas amenazas de las que había sido víctima estos últimos años", detalla el posicionamiento escrito de la representación de Acnudh.
En cuanto a Valdovinos Fuentes, fue asesinado por personas armadas y "era un reconocido defensor de los derechos del pueblo afromexicano", que pertenecía al Comité de Seguridad de la Unión Cívica Democrática de Barrios, Colonias y Comunidades.
Cecilia Monzón, la activista y abogada “incómoda” de la política https://t.co/yXYSBt3wgy
— Imagen Poblana (@ImagenPoblana) May 23, 2022
CONTRA LA IMPUNIDAD
El organismo internacional que encabeza la expresidenta chilena Michelle Bachelet apuntó hacia la falta de castigo para evitar la repetición de estos crímenes.
"Además de la urgente necesidad de evitar la impunidad de estos crímenes, es fundamental que se incluya la perspectiva de género como un elemento central del proceso de investigación, sanción y reparación", escribió el representante de Acnudh en el país latinoamericano, el peruano Guillermo Fernández-Maldonado.
La postura de Acnudh sobre estos crímenes es que "se esclarezca de manera pronta, diligente e imparcial, las circunstancias de su asesinato, en particular determinar si ocurrió en represalia a su labor de defensa de los derechos humanos".
Estos dos asesinatos son nuevos ejemplos de la violencia cometida por "quienes intentan silenciar a las personas que denuncian el racismo, la violencia de género, defienden los derechos fundamentales de personas y comunidades históricamente discriminadas", lamenta Fernández-Maldonado.
Acnudh estima que es preciso que todas las entidades estatales concernidas sumen esfuerzos para enviar un claro mensaje de que es posible poner fin a este ciclo de impunidad y prevenir estos ataques.
Asimismo indica que a la voluntad política estatal debería sumarse también "un firme apoyo y movilización de todos los actores de la sociedad en reconocimiento de la labor de quienes defienden los derechos humanos de todas las personas".
Finalmente, reitera su llamado a que las autoridades realicen averiguaciones prontas y objetivas, donde es preciso se agoten todas las líneas de investigación, y se determinen los móviles y los autores materiales e intelectuales de estos crímenes.
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