México rechaza la colocación en su territorio de un muro de púas, como propuso el Gobierno del estado estadounidense de Texas para detener el tránsito de personas migrantes hacia Estados Unidos, expresó hoy martes el titular de la autoridad migratoria mexicana, Francisco Garduño.
"La política del Gobierno mexicano ha sido no al muro. No al muro tal y como lo conocemos, pero tampoco creemos y no queremos un muro de púas", dijo Garduño, comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), durante una visita de trabajo al estado de Coahuila.
"En esto, es no. Encontremos otros mecanismos de coordinación para poder atender y resolver el fenómeno migratorio", añadió el funcionario, que aseguró se fortalecerá la cooperación para brindar atención a las personas migrantes irregulares que son víctimas de redes criminales.
El INM precisó en un comunicado que su titular acudió a la ciudad fronteriza de Piedras Negras, en Coahuila, en el marco de una reunión de evaluación de la estrategia migratoria que se lleva a cabo en la frontera de esta entidad, una de las más utilizadas por traficantes de personas.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, dijo el 11 de mayo que su Gobierno había donado carretes de alambre de púas a Coahuila y que daría entrenamiento a autoridades mexicanas para colocarlo con el objetivo de evitar cruces irregulares de migrantes a Estados Unidos.
Su iniciativa se enmarca en acuerdos que estableció unilateralmente con los Gobiernos de los estados que comparten frontera con Texas, luego de haber obstaculizado durante 10 días en abril los cruces fronterizos con inspecciones adicionales a camiones y autobuses.
Las inspecciones, encaminadas a impedir el paso de migrantes o narcóticos, se estima ocasionaron pérdidas millonarias en ambos países y Abbott condicionó su levantamiento a la adopción de medidas que reforzaran la seguridad fronteriza en la parte mexicana.
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