Una joven de 22 años fue detenida junto a su pareja después de que inventara una amenaza de bomba en el aeropuerto de Ezeiza, en Buenos Aires. Las autoridades revelaron que la mujer hizo esto para intentar que retrasasen el vuelo que su novio iba a perder.
De acuerdo con medios locales, la mujer y su pareja viajaban en un automóvil con dirección al aeropuerto, aunque iban con varios minutos de retraso, por lo que presa del pánico, llamó al servicio de atención al cliente de la terminal y aseguró que había dejado un artefacto explosivo en uno de los baños.
“En la terminal internacional acabo de dejar una bomba en una mochila. Es una bomba casera hecha por mí. En el baño. Estoy harta de este gobierno”, fue parte de la conversación que la chica tuvo con el operador telefónico.
La joven hizo todo esto pensando que la llamada era anónima, por lo que momentos más tarde las autoridades lograron rastrear su número telefónico, pues el Call Center de Aeropuertos Argentina 2000 (AA2000) comunicó la amenaza a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), que a su vez se lo notificó al Juzgado Federal de Primera Instancia en lo Criminal y Correccional de la localidad.
La PSA identificó a una mujer que había realizado una amenaza de bomba al Aeropuerto Int. de Ezeiza para que su pareja no perdiera un vuelo. Se allanó su domicilio en #CañadadeGómez (Santa Fe) y se secuestró el teléfono por intimidación pública.
— PSA (@SeguridadPSA) May 22, 2022
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Tras la llamada de la mujer, el aeropuerto implementó el protocolo de seguridad antiterrorista, con la participación del Grupo Especial de Control de Explosivos y Armas Especiales, el ministerio de Sanidad y los bomberos. El vuelo, programado inicialmente para las 12:45 horas, despegó al final a las 22:10 horas, permitiendo que el novio de la joven pudiera llegar a tiempo.
Las autoridades lograron identificar a la mujer gracias a que los servicios policiales intervinieron el teléfono con el que hizo la llamada, que le pertenecía a su novio, además, gracias a las cámaras de seguridad del aeropuerto pudieron reconocerla. Tras esta falsa amenaza, la pareja ha sido imputada por “intimidación pública”, que podría materializarse en una sentencia de entre dos y seis años de prisión. Además, tendrán que pagar los costos de la alerta que generaron, que ascienden a 200,000 pesos.
Finalmente, le confiscaron su celular y registraron su domicilio, en donde no se encontraron materiales para bombas, pero sí plantas de cannabis, que aparentemente son recetadas por su novio, que es médico, para uso medicinal.
