Ladrones sorprendieron a joven que jugaba Pokémon; murió apuñalado

Ladrones sorprendieron a joven que jugaba Pokémon; murió apuñalado

Un joven de 29 años originario de Atlixco murió en la plancha de un hospital tras recibir dos puñaladas durante un intento de asalto, registrado este fin de semana en la ciudad de Puebla, mientras la víctima jugaba en la aplicación de Pokémon Go.

 

La página de Facebook Pokémon Go Puebla TM publicó el caso al tiempo en que pidieron ayuda para los familiares de quien fue identificado como Edgar Paredes Tello, de 29 años, ya que su familia es de escasos recursos y no pueden solventar los gastos funerarios.

 

Señalaron que el joven originario de Atlixco viajó a Puebla como parte de una actividad que hicieron otros jugadores de esta aplicación, el pasado sábado en la ciudad de Puebla.

 

Se dio a conocer que aproximadamente a las 10:30 horas, Edgar caminaba por la 11 Norte, a una calle del Paseo Bravo, cuando dos sujetos lo interceptaron para exigirle que entregara su teléfono celular.

 

Presuntamente, la víctima llevaba su celular amarrado al cuerpo con su funda, por lo que los delincuentes no pudieron arrebatárselo y en represalia lo apuñalaron en el abdomen en un par de ocasiones, para después darse a la fuga.

 

Transeúntes que se percataron de los hechos pidieron ayuda de la policía y una ambulancia que lo llevó al Hospital de Traumatología y Ortopedia del IMSS en la 6 Poniente, hasta donde su familia llegó al ser notificada de lo ocurrido.

 

Pero las heridas con arma blanca durante el asalto le causaron daños en órganos vitales, por lo que horas después de su ingreso se dio a conocer su muerte y se dio parte de estos hechos a la Fiscalía General del Estado.

 

El cuerpo de Edgar fue trasladado este lunes al municipio de Atlixco, donde su familia busca apoyos económicos para poder darle sepultura y cubrir los gastos funerarios.

 

Entre 2016 y 2017, cuando el juego de Pokémon Go tuvo su mayor auge, también se registraron casos de jugadores asaltados, atropellados y víctimas de otros accidentes generados por la distracción que les genera el juego de realidad aumentada.

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